Rajada de Marcelino

Marcelino García Toral, ex entrenador del Valencia y actual técnico del Villarreal, ha vuelto a hablar sobre su etapa en el Valencia y ha sido muy crítico con la gestión del club valenciano de Peter Lim y Meriton, y al mismo tiempo ha dejado claro que prefiere la forma de trabajar del Villarreal antes que la del Valencia de la que ha dicho que actúa por capricho.

Marcelino García Toral ha asegurado que mientras que en el Villarreal se hacen las cosas con coherencia, en el Valencia que todo se hace por capricho, respondiendo así a si cree que fue despedido del Valencia por celos. "Los dirigentes si por eso es... creo que es muy fácil arreglarlo. Nunca demostramos, ni por mi parte ni por Mateu Alemany, de considerarnos protagonistas de aquello. Repartimos todo la responsabilidad de los éxitos logrados... primero con la plantilla porque siempre tenemos que pensar que los futbolistas son los principales protagonistas que son los que nos hacen disfrutar al resto... son los que juegan, son los que ganan. A partir de ahí, no sé si mi despido del Valencia fue por celos de Murthy. Sí parece ser que aquí se actúa por trabajo y por coherencia y Valencia por capricho", ha dicho en una entrevista en Onda Deportiva Valencia.

Marcelino ha revelado que le da pena la actual situación deportiva por la que atraviesa el Valencia. "Me da pena porque el Valencia es un club histórico que debería estar en la parte alta de la tabla que es donde su historia dice. Yo creo que en la historia de LaLiga el Valencia es el cuarto y debería estar en esas posiciones. A principios de siglo estaba por encima del Atleti pero ellos con una buena gestión les han adelantado. El Valencia por todo, por afición, historia, títulos debería estar arriba pero si gestionas mal... todo te lleva al lugar que mereces en función de lo que haces".

Marcelino también ha revivido cómo fue su despido del Valencia. El entrenador ha dejado un recado al Peter Lim del que ha dicho que no le importó nada el ganar la Copa del Rey del año 2019. "Aquel fue un momento muy complicado. Cuando me lo comunicaron, de hecho me tuve que sentar porque me entró un calor por todo el cuerpo... me sentí hasta mal y pensé que me entraba un mareo y tuve que sentarme. No lo esperábamos aunque el ambiente ya estaba enrarecido. En la pretemporada ya pareció que se estaba torpedeando el proyecto. De la Copa Lim nunca nos felicitó y la prueba evidente es que el propietario estaba allí en Sevilla y se fue a cenar con Beckham y no vino a la celebración".

También ha explicado el momento del adiós. "Habíamos sido campeones recientemente y clasificado para la Champions y todo muy recientemente. La sensación que yo tenía como entrenador es que la plantilla quería más y nosotros queríamos más y había muy buen entendimiento. Hubo una ruptura de lo que había funcionado con la dirección que no se sabe muy bien".