El lado oculto de Fernando Alonso
El exingeniero de Stroll revela cómo es realmente trabajar con el piloto asturiano y destapa un episodio llamativo dentro de la fábrica de Aston Martin

En la Fórmula 1, la relación entre piloto e ingeniero de carrera es mucho más compleja de lo que se aprecia por televisión. Ben Mitchell, actual responsable de Performance en Aston Martin y antiguo ingeniero de pista de Lance Stroll, ha destapado detalles inéditos sobre cómo trabaja Fernando Alonso, comparándolo incluso con Sebastian Vettel y el propio Stroll.
Según Mitchell, todos ellos comparten un rasgo común: la obsesión por los datos. “Les gusta estar enterrados en datos”, explicó en declaraciones a la web oficial de la F1. El ingeniero británico asegura que Alonso destaca por su carácter meticuloso y por la forma en la que exige al personal del equipo. Tanto es así, que llegó a protagonizar una escena que hoy recuerda como un ejemplo de la intensidad del bicampeón.

Alonso, el piloto más exigente
Mitchell relató que, en más de una ocasión, al llegar a la oficina de Aston Martin se encontró a Fernando esperándole delante del ordenador, señalando el reloj y preguntando: “¿Dónde estabais chicos?”. La situación se produjo incluso en momentos de toque de queda, lo que refleja la implicación extrema del piloto asturiano en cada aspecto del rendimiento del monoplaza.
El ingeniero asegura que, pese a estas tensiones puntuales, la relación entre piloto y equipo siempre termina en buen puerto. “A veces te pueden alzar la voz, pero luego acabamos cenando juntos sin ningún problema”, matizó, restando dramatismo a los momentos de mayor tensión.
Comparación con Vettel y Stroll
En sus palabras, Mitchell subrayó que esta exigencia no es exclusiva de Alonso: “Vettel era igual y Lance también”. La diferencia, según él, radica en que esa avalancha de información puede ser muy útil en ocasiones, aunque en otras llega a convertirse en un ruido que limita la capacidad de los pilotos para pilotar con libertad.
El ingeniero también aprovechó para defender a los pilotos de Fórmula 1 de las críticas externas cuando reaccionan de forma airada por radio. “La gente les señala rápidamente, pero en el fútbol nadie se escandaliza cuando un jugador patea una botella tras un cambio”, argumentó.
La intensidad de Alonso en Aston Martin
Lejos de ser una anécdota aislada, la escena descrita por Mitchell encaja con la reputación de Alonso como uno de los pilotos más obsesivos y trabajadores de la parrilla. Su forma de presionar a los ingenieros y de exigir información al detalle se ha convertido en una de las señas de identidad de su etapa en Aston Martin, donde no deja nada al azar en su búsqueda de resultados.
Con este retrato, Mitchell confirma lo que muchos intuían: Alonso no solo brilla en la pista, sino también en los despachos y oficinas, donde marca el mismo nivel de exigencia que le ha convertido en leyenda.