Márquez se la juega en Hungría
El piloto del Gresini Racing analiza los retos del nuevo circuito de Balaton Park y cómo aprovechar su experiencia previa

Álex Márquez llega al Balaton Park con la intención de recuperar la consistencia que mostró en la primera parte de la temporada. Tras una carrera complicada en Austria, donde una vuelta larga de sanción le hizo caer de la cuarta a la decimotercera posición, el piloto catalán afronta el estreno del circuito húngaro con la ventaja de haber rodado previamente, aunque fuera con una Ducati de calle.
“Un circuito nuevo es una oportunidad de marcar diferencias”, asegura Márquez. Conocer las líneas y referencias del trazado puede ser útil, pero no debe considerarse como una ventaja definitiva. “Es un circuito nuevo y hay que verlo como una oportunidad de ser el más hábil y adaptarse mejor que los demás”, explica. Añade que su experiencia previa le permitirá interpretar mejor la pista, aunque la moto de calle que usó ofrece sensaciones distintas a la que pilotará en MotoGP.

La primera curva, un embudo clave
El piloto destaca que la primera curva será un punto crítico, donde será vital salir delante para evitar riesgos y posibles caídas. Además, señala que hay varios puntos de adelantamiento en el circuito, pero que será necesario calcularlos con precisión. “Habrá que cuadrarlos muy bien, especialmente la uno y la cinco, donde hay margen para irse largo y buscar el adelantamiento correcto”, comenta Márquez, consciente de que un error inicial podría condicionar toda la carrera.
Márquez reflexiona sobre el desempeño de su joven compañero, Fermín Aldeguer, cuya actuación en Austria fue destacada. “No me gusta comparar, pero hizo un carrerón. Ver a un rookie empujar al límite me sirve para aprender detalles y mejorar mi propio ritmo”, reconoce. Por otro lado, el piloto admite que en Austria no pudo arriesgar al máximo tras la sanción, optando por una carrera sólida para minimizar pérdidas, algo que espera mejorar en Hungría. Además, destaca la importancia de mantener la calma y gestionar el riesgo, especialmente en un circuito nuevo donde cada curva puede ser decisiva.
Detalles técnicos y elección de set-up
El trazado corto y variado de Balaton Park plantea dudas sobre la elección de marchas y el set-up de la moto. “Honestamente, no cambia mucho usar segunda a sexta o primera a quinta. Es más cuestión de freno motor y ajuste del tiro de cadena. Aún estamos analizando qué configuración será más efectiva”, explica Márquez. También señala que los pequeños detalles, como la disposición de las curvas rápidas y lentas, serán determinantes para encontrar el mejor ritmo.
Más allá de lo técnico, Álex Márquez se muestra motivado por recuperar el “flow” que le permitió destacar en la primera parte de la temporada. Reconoce que Balaton Park, al ser un circuito nuevo, es también un desafío mental: “Es fácil perderse al principio, pero también es una oportunidad de demostrar quién se adapta mejor y quién puede marcar la diferencia”. Con esa mentalidad, Márquez espera ser uno de los pilotos más consistentes y hábiles en esta nueva pista, aprovechando cada ventaja posible frente a sus rivales.