El secreto mejor guardado de Rossi
Álex Crivillé explica en DAZN la técnica del italiano que marcó un antes y un después en la categoría reina
Valentino Rossi no solo fue un campeón dentro de la pista, también un innovador que cambió para siempre la manera de pilotar en MotoGP. Así lo ha explicado Álex Crivillé en el programa especial DECOD3D de DAZN, dedicado a analizar la figura del mítico número 46. El primer campeón español de 500cc recordó cómo el italiano irrumpió en la categoría reina a principios de los 2000 con un estilo clásico, pero que pronto transformó con un detalle que nadie había visto antes y que hoy en día sigue presente en todos los pilotos de la parrilla: sacar la pierna en las frenadas.
De estilo clásico a gesto revolucionario
Crivillé compartió parrilla con Rossi en su primer año en 500cc y reconoce que al principio no le veía nada distinto. “Era un piloto alto, espigado, con un estilo clásico, cómodo sobre la moto, sin gestos extraños”, comentó. Sin embargo, la transición de las motos de dos tiempos a las de cuatro tiempos obligó al italiano a evolucionar. Fue entonces cuando, según Crivi, Rossi pasó de un pilotaje convencional a imponer una técnica que acabaría siendo imitada por todos: la famosa pierna estirada en las frenadas.
El expiloto español detalla que nadie entendía por qué lo hacía, pero lo cierto es que Rossi empezó a ganar con esa técnica y pronto el resto de la parrilla copió el movimiento. “Valentino frenaba, sacaba la pierna, y todos decíamos: ¿pero esto para qué es? La realidad es que funcionaba, ganaba carreras, y ahí se quedó esa moda que todavía hoy todos los pilotos utilizan”, explicó.
El origen de la “pierna de Rossi”
Aunque no existe una explicación definitiva, Crivillé apunta varias teorías: “Diría que es para tener balance, para notar la ergonomía de la moto. Algunos aseguran que aerodinámicamente ayuda un poco más en la curva, aunque sea una milésima. En cualquier caso, dio un plus de estabilidad y Rossi supo sacarle partido”.
La técnica, que comenzó como un gesto aislado, terminó por convertirse en un sello distintivo del italiano, hasta el punto de ser reconocida como una de las grandes aportaciones al pilotaje moderno. “A día de hoy, todavía no está muy claro el porqué exacto, pero está claro que Rossi cambió la forma de pilotar”, concluyó Crivillé.
El legado de un mito
Más allá de los títulos, victorias y momentos de gloria, Rossi dejó un legado técnico que va más allá de su carisma o de su impacto mediático. Crivillé lo resume en una frase: el ‘Dottore’ no solo fue un campeón, fue el hombre que revolucionó el pilotaje de MotoGP.