El
Cádiz CF, después de terminar la temporada con su récord histórico de puntos en Primera división (44) e igualar su mejor posición siendo duodécimo, como con Víctor Espárrago en la lejana 87/88, se prepara para la campaña en la que buscará
consolidarse en LaLiga. Para ello, la nueva
dirección deportiva centra sus esfuerzos en
dotar a la plantilla de Álvaro Cervera de lo más preciado que hay en el fútbol:
el gol. Y ya hay varias negociaciones en marcha que, aunque están aún en fase embrionaria, dotarían de una
delantera de lujo al equipo.
La secretaría técnica que comandan
Enrique Ortiz y Jorge Cordero están buscando delanteros que se complementen y compitan con
Álvaro Negredo (contrato hasta 2022) y el
Choco Lozano (2023), que a priori seguirán en el Carranza.
Filip Malbasic (2023) está a la espera de conocer los avances del club amarillo para valorar sus opciones de quedarse y realizar una estimación de los minutos que tendría en la 21/22. Saldrá
Ivan Saponjic, que debe regresar al Atlético tras finalizar su cesión, y prácticamente sin opciones siguen los tres que regresan a la entidad amarilla:
Nano Mesa, Álvaro Giménez y Caye Quintana.
El objetivo número uno en ese sentido es conseguir la
continuidad del polivalente Rubén Sobrino, a quien Cervera ha usado más en banda que como referencia y ha dado un gran rendimiento desde su llegada en el pasado mercado invernal en calidad de prestado por un
Valencia que no cuenta con él. El atacante manchego tiene aún un año más de contrato con la entidad che y desde su entorno trabajan para
intentar liberarse y seguir en Cádiz, donde mucho tiempo después
ha vuelto a sentirse importante.
No obstante, con Negredo, Choco Lozano y una hipotética continuidad de Sobrino no daría por cerrada la delantera. A ello invita a pensar los últimos tanteos de Ortiz y Cordero, que han tanteado a un
delantero puntero de Segunda y a una joven irrupción de Primera división: el goleador del Sporting de Gijón Uros Durdevic, más conocido como
Djuka, y el internacional sub 21 del Villarreal
Fernando Niño.
El
montenegrino tiene prácticamente
decidido salir del Sporting, pese a los intentos de retenerle del club asturiano, con quien tiene contrato hasta 2023. Sus
22 goles la pasada campaña le han granjeado el interés de varios clubes de LaLiga y, a sus 27 años, no quiere dejar escapar esta
oportunidad de dar el salto después de tres temporadas en El Molinón, donde llegó en el verano de 2018 procedente del
Olympiacos griego a cambio de
2,5 millones de euros.
El Cádiz CF no ha sido el único que le ha tanteado, pues desde el
RCD Mallorca buscan un
'perfil Budimir' para su
retorno a Primera. Osasuna se quedará en propiedad con el ex de los bermellones, que ingresarán
8 millones; cifra que desean invertir con el también balcánico en el primer puesto de su agenda. El Sporting, eso sí, amenaza con resistir el deseo de Djuka de salir y el fuerte interés de gaditanos y baleares. Por el momento, se remite a su
cláusula de rescisión, que ronda los 30 kilos.
Otro de los delanteros que gustan es un viejo conocido.
Fernando Niño, natural de Rota, jugó en categoría
infantil y cadete en el Cádiz CF antes de marcharse ya en edad juvenil al Villarreal, donde su buen hacer en el filial le permitió debutar con el primer equipo con sólo 19 años en la 19/20. La entidad cadista ha
explorado la vía de una cesión, según apunta
Diario de Cádiz. No está claro, porque precisamente ha sido con
Unai Emery, en esta 20/21, cuando el joven punta ha explotado con ocho goles, jugando en Europa y, por momentos, contando incluso por delante de jugadores como
Alcácer o Bacca.