Se cumple un año de cuando Sadiq 'volvió loco' a Koundé
Hace un año que la suerte para el Almería y el Sevilla era muy distinta en la competición del KO, la Copa del Rey. Ambos equipos veían como avanzaban rondas imparables, especialmente en el caso del Sevilla que empezaba a preparar su candidatura para un título que finalmente no llegaría a las vitrinas de Nervión.
Mientras que en esta temporada ya ambos conjuntos han caído eliminados de la contienda el pasado mes de enero, hace justo un año que se veían las caras en los cuartos de final de la Copa del Rey buscando un billete para las semifinales. Dicho partido se disputó en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo, pues se debía jugar en el campo del equipo de menor categoría.
Muchos en Almería sostienen que este partido fue el que dinamitó la confianza del vestuario en José Gomes. Su filosofía y manera de actuar no cambió ni a pesar de la entidad del rival que tenía por delante. En un año marcado por un cargado calendario debido a la pandemia, donde el Almería tuvo que jugar varias veces partidos intersemanales, el entrenador portugués apostó por una peculiar manera de aportar frescura a su plantilla.
Las famosas rotaciones de José Gomes de hasta once jugadores con respecto al partido anterior le llevaron a la primera plana nacional. El método del portugués hasta entonces estaba dando resultado: los suplentes habían llevado al equipo indálico a los cuartos de final de Copa e incluso habían firmado muy buenos resultado en el campeonato liguero.
El Sevilla no se guardó nada. De hecho, aquel partido significó el debut del Papu Gómez como jugador hispalense. Finalmente el Sevilla vencería la contienda gracias a un espectacular centro de Suso que sirvió en bandeja de plata el gol a Ocampos. Los visitantes ganaron por la mínima a pesar de enfrentarse a los suplentes de un equipo de Segunda.
Eso sí, desde el banquillo José Gomes dio entrada a los hombres más importantes del Almería. Entre ellos estaba Sadiq Umar, la sensación de los últimos meses en Almería y que incluso ya había empezado a estar relacionado con el Sevilla.
El delantero nigeriano fue la mayor arma de peligro aquella noche para el Almería. De hecho, fue el único capaz en superar a un Koundé que por aquel entonces estaba en estado de gracia. Ni Lewandowski, ni Lukaku, ni Suárez ni Benzema: el único que puso en tantos aprietos al francés fue Sadiq Umar.
De hecho, el propio Koundé confesaba al término del partido que Sadiq le había puesto las cosas muy difíciles y reconocía que ‘tenía que trabajar’ para mejorar. Muchos aficionados en redes sociales también compartían la opinión del central internacional francés: ‘‘Ha vuelto loco a Koundé’’, ‘‘Acaba de salir y ha sentado a Koundé’’. Aquella vez, hace un año, fue la primera toma de contacto entre uno de los mejores centrales del mundo y uno que promete ser de los mejores delanteros del mundo.
Mientras que en esta temporada ya ambos conjuntos han caído eliminados de la contienda el pasado mes de enero, hace justo un año que se veían las caras en los cuartos de final de la Copa del Rey buscando un billete para las semifinales. Dicho partido se disputó en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo, pues se debía jugar en el campo del equipo de menor categoría.
Muchos en Almería sostienen que este partido fue el que dinamitó la confianza del vestuario en José Gomes. Su filosofía y manera de actuar no cambió ni a pesar de la entidad del rival que tenía por delante. En un año marcado por un cargado calendario debido a la pandemia, donde el Almería tuvo que jugar varias veces partidos intersemanales, el entrenador portugués apostó por una peculiar manera de aportar frescura a su plantilla.
Las famosas rotaciones de José Gomes de hasta once jugadores con respecto al partido anterior le llevaron a la primera plana nacional. El método del portugués hasta entonces estaba dando resultado: los suplentes habían llevado al equipo indálico a los cuartos de final de Copa e incluso habían firmado muy buenos resultado en el campeonato liguero.
El Sevilla no se guardó nada. De hecho, aquel partido significó el debut del Papu Gómez como jugador hispalense. Finalmente el Sevilla vencería la contienda gracias a un espectacular centro de Suso que sirvió en bandeja de plata el gol a Ocampos. Los visitantes ganaron por la mínima a pesar de enfrentarse a los suplentes de un equipo de Segunda.
Eso sí, desde el banquillo José Gomes dio entrada a los hombres más importantes del Almería. Entre ellos estaba Sadiq Umar, la sensación de los últimos meses en Almería y que incluso ya había empezado a estar relacionado con el Sevilla.
El delantero nigeriano fue la mayor arma de peligro aquella noche para el Almería. De hecho, fue el único capaz en superar a un Koundé que por aquel entonces estaba en estado de gracia. Ni Lewandowski, ni Lukaku, ni Suárez ni Benzema: el único que puso en tantos aprietos al francés fue Sadiq Umar.
De hecho, el propio Koundé confesaba al término del partido que Sadiq le había puesto las cosas muy difíciles y reconocía que ‘tenía que trabajar’ para mejorar. Muchos aficionados en redes sociales también compartían la opinión del central internacional francés: ‘‘Ha vuelto loco a Koundé’’, ‘‘Acaba de salir y ha sentado a Koundé’’. Aquella vez, hace un año, fue la primera toma de contacto entre uno de los mejores centrales del mundo y uno que promete ser de los mejores delanteros del mundo.