Parecía que iba a ser un partido tranquilo para el Helvetia BM Prointegrada, después del gran inicio de partido que realizó el equipo sevillano en su visita a Melilla, pero una decisión arbitral en torno al minuto 20 afectó a los de Fernando Castelló. Hasta entonces, hasta la tarjeta roja directa a Juan Andreu en una jugada ofensiva en torno a los seis metros, la defensa había funcionado bastante bien y el ataque, con algún que otro momento de poca fluidez, también elevó el nivel con respecto a partidos anteriores.
Pero entonces llegó una acción que pudo marcar el encuentro. Afortunadamente, no fue así, ya que sólo descolocó al Helvetia BM Prointegrada durante unos minutos, pero la descalificación del capitán pudo salirle cara a los de Fernando Castelló. Lo positivo fue que este golpe sólo lo acusaron durante unos minutos y que los locales realmente no supieron aprovecharlo. Porque, aunque se acercaron un poco en el marcador, lo cierto es que los trianeros siempre supieron administrar la ventaja en el electrónico.
En la segunda mitad, ya con la acción de la expulsión olvidada, el equipo volvió a mostrar su mejor versión al apoyarse en la defensa y la portería, ya que Álvaro supo darle continuidad en la segunda parte a las paradas de Kike durante el primer acto. Así se volvió a marchar en el marcador el Helvetia BM Prointegrada, aunque en la recta final, debido al empuje del Melilla Sport Capital Balonmano, la ventaja de los visitantes se vio reducida.
Con este triunfo, el cuadro sevillano vuelve a la senda de la victoria tras el varapalo de la semana pasada en Palma del Río, donde los de Fernando Castelló encajaron una derrota que no entraba en los planes. Ahora, con estos dos puntos en el zurrón, el Helvetia BM Prointegrada vuelve a mirar hacia la parte alta de la tabla, lugar en el que sólo se podrá asentar si consigue una regularidad y se acostumbra a sumar de dos en dos cada semana.
Estadio Deportivo3 min lectura