Pablo Machín solicita públicamente, siempre que puede, refuerzos para enero, mientras que Joaquín Caparrós asegura que llevan trabajando en ello desde el pasado 1 de septiembre, rastreando un mercado al que acudirán si encuentran algo que mejore lo que hay.
Y no resultará muy complicado al utrerano encontrar algo que mejore a una 'unidad B' que ha demostrado no estar al nivel de las exigencias. Por ello, la idea es firmar a un central, un mediocentro si se encarta y un delantero joven y con hambre que luche por la titularidad, pero que asuma el rol secundario con el que a priori aterrizaría en Nervión.
Y en ese perfil para la vanguardia ha aparecido el nombre de Patrik Schick,
delantero checo de 22 años y 1,90 metros al que el Sevilla viene siguiendo desde su etapa como juvenil. De ahí que no sea de extrañar que
Monchi lo fichara hace dos veranos para la
Roma. Internacional con su país, el checo goza de bastantes calidad y movilidad, siendo mucho más que un '9' espigado y de referencia; un jugador con talento que cae a banda y que se siente cómodo jugando con espacios, trabajando para y por el equipo.
Justo lo que necesita el Sevilla como recambio de André Silva y Ben Yedder.Según
Corriere dello Sport, la
Roma se está planteando su salida en préstamo este enero, en busca de continuidad (sólo ha sido titular en dos de los 5 partidos de la Serie A que ha jugado), siendo el
Sevilla y el Valladolid los que han mostrado su interés. El
Arsenal, por su parte, busca algún tipo de trueque en enero con
Ramsey, que acaba contrato y no tiene intención de renovar.