Wissam Ben Yedder selló el pasado domingo el triunfo del Sevilla ante el Espanyol con un gol en el epílogo que sentenció a los de Rubi y dejó a Machín y los suyos a sólo un punto del liderato. El franco-tunecino salió en el descanso con 0-1 en el marcador y revolucionó el ataque sevillista, mandando un disparo al larguero antes de hacer el definitivo 2-1 en el 88'. Su diana culminó la remontada y sirvió para que el ex del Toulouse firmara su tanto número 50 como jugador sevillista. Números redondos para un goleador de época.
Ben Yedder ha necesitado sólo 101 partidos para llegar a los 50 goles como nervionense. Con esta cifra, iguala a Julio Baptista y se queda a tiro de Ramón Vázquez (51), Enrique Montero (52), Pepe López y Torróntegui (54), Pepillo (56) y Toni Polster (57).
Además, el '9' blanquirrojo es el tercero que menos partidos ha necesitado jugar para alcanzar esos 50 goles en lo que va de siglo XXI, sólo por detrás de Kanouté y Baptista, que necesitaron 82 y 98 choques, respectivamente. Más encuentros aún tuvieron que disputar artilleros del nivel de Luis Fabiano (113), Kévin Gameiro (118). Álvaro Negredo logró la media centena en 135 citas, mientras que Carlos Bacca, que sumó 108 choques con el Sevilla, se quedó en 49 tantos.
Además, Ben Yedder es el que mejor promedio goles/minutos presenta de entre los grandes delanteros recientes que han jugado en Nervión. Promedia un tanto cada 121 minutos, frente a los 123' de Gameiro, los 144' de Luis Fabiano, 145' de Baptista, 147' de Negredo y 150' de Kanouté.
Esta temporada no pintaba nada sencilla para él. El club buscaba en verano al menos dos nueves de nivel -al final sólo llegó André Silva- y su perfil no encaja en absoluto en la filosofía de Pablo Machín. Por momentos, la opción de buscar una salida parecía la única solución posible para él, sobre todo después de los momentos de ostracismo que vivió el año anterior con el millonario fichaje de Luis Fernando Muriel y la llegada de Sandro Ramírez en enero, que bajo ningún concepto deseaba repetir. El galo, con todo en contra, apostó por quedarse y ha convencido al entrenador soriano a base de marcar goles hasta ganarse un puesto de titular indiscutible.
“Ben Yedder es gol”, aseguraba Machín en la rueda de prensa posterior al Sevilla-Espanyol. No es para menos. Ya suma 10 tantos en lo que va de curso (seis de Liga y cuatro de Europa League) y es el segundo máximo realizador sólo por detrás de Pablo Sarabia, que lleva 13, y por delante de los siete de André Silva.
Después de convencer a Machín, su próximo reto es ganarse también la confianza del seleccionador francés, Didier Deschamps, quien lo convocó el pasado marzo por primera vez para el equipo nacional galo y le preconvocó para el Mundial de Rusia, aunque finalmente no entró en la lista de 23.
Deschamps aseguró entonces que es un delantero "diferente" que venía siguiendo desde hace tiempo, y afirmó que su eficacia goleadora no ha sido ajena para él. "Tiene la capacidad de marcar cuando entra, tiene un perfil diferente, más movilidad y la vivacidad, es extremadamente eficaz. Le seguimos, estaba en la pre-lista, pero para un atacante ser eficaz es un punto muy favorable", indicó entonces el técnico 'bleu'.
Enrique García4 min lectura