Alejandro Pozo, que
regresa al Sevilla FC tras concluir su cesión al Granada CF, indicó este lunes que
se marcha "feliz" por haber logrado los objetivos que se había marcado, entre ellos el del ascenso del equipo a LaLiga Santander, pero
"triste" por dejar "un club indescriptible".
Pozo se marcha del Granada tras haber disputado
30 encuentros en LaLiga 1/2/3, casi la mitad de ellos como titular, haber marcado
cuatro goles y dado
una asistencia, lo que valió para estrenarse
con la selección española sub 21 durante la temporada.
El atacante sevillano, de
20 años, indica en una carta publicada en su cuenta oficial de Twitter a modo de despedida del Granada que cuando llegó lo hizo con muchos "nervios" por ser "la primera vez" que salía de casa pero que
"jamás" pensó que "iba a ser así".
"Llegué con muchas ganas de demostrar lo que soy capaz de dar y de luchar por este escudo, y
me voy feliz por haber conseguido mis objetivos y por hacer historia en este club", indicó Pozo, uno de los más aclamados por la afición en las celebraciones del ascenso.
El jugador también se marcha "triste" por dejar a "un club indescriptible" que al llegar a Primera división está "donde se merece" y que siempre será "especial" para él.
Pozo agregó que
"jamás" olvidará el día del ascenso y se mostró agradecido con todos los empleados del club, los miembros del cuerpo técnico, los compañeros con los que ha formado "una familia" y los aficionados porque desde que llegó se sintió "arropado con su cariño".