Hicieron gol De Jong y Nolito, en quienes ha confiado Lopetegui contra viento y marea, y brilló sobremanera Óliver, que minimizó la noticia de la marcha de Banega
Para doblegar a un equipo tan disciplinado tácticamente como el
Granada CF, al que el Barça sólo pudo vencer la semana pasada tras quedarse los de Diego Martínez con uno menos, se necesita rapidez y precisión tras el robo. Presionar, recuperarla y profundizar por la banda contraria, antes de que bascule, en definitiva. Y eso hizo anoche un
Sevilla FC que, en su 130 cumpleaños, se enteraba de que en verano se apagará una las velas que mejor le ha iluminado en la última década, la de
Banega.Hizo olvidar al '10', baja ayer por acumulación de amonestaciones, una de las grandes apuestas de Julen Lopetegui:
Óliver Torres. El extremeño, siempre mejor por dentro, entendió como nadie lo que necesitaba el choque y, cada vez que le llegaba el balón, lo ponía al lado opuesto, por donde entraban
Navas y Ocampos con la sexta marcha.
Nolito y De Jong, quienes generaron
peligro y goles, dieron también la razón en sus apuestas al técnico vasco, que en verano instó a Monchi a que firmase a un
Fernando que se multiplicó y que falló sólo dos pases en todo el partido (dio 50 bien de 52).
Un recurso llamado Gudelj
Tras el descanso, fuera el
Mudo (impreciso y amonestado) y dentro un
Gudelj que se ha convertido en el jugador número 12 de
Lopetegui. Con 2-0 y partidos jueves y domingo, era cuestión de contener. Y a eso se dedicó el
Sevilla, con pocos apuros.
De Jong suma y sigue para bien del Sevilla FC
Trabajó mucho, como siempre. Recuperó bastantes balones, como otras veces. Y marcó un tanto, como últimamente. Éste
De Jong sí es el de Holanda y hay un importante motivo: ahora el equipo ataca mejor. Con más gente, por diferentes pasillos y a distintos ritmos.