Gudelj, el "fútbol-champán" y el móvil roto por su sevillismo

Gudelj, el "fútbol-champán" y el móvil roto por su sevillismo
Gudelj se pone a disposición de Lopetegui para la semifinal. - R. S.
Gudelj ha vivido un episodio difícil con su positivo en coronavirus pero ha regresado más motivado que nunca y abrumado por un recibimiento en Alemania que recordará toda la vida. Así, en los medios del club relata cómo ha sido su experiencia y se ofrece a Lopetegui para jugar ya contra el Manchester si lo considera necesario.  

"No he tenido momentos en los que me asustara o lo pasara mal. Sé que es un virus grave pero me sentía bien. Sabía que tenía el virus y el doctor me decía que descansara si me sentía mal, pero mi cuerpo necesitaba entrenar, los preparadores físicos me mandaban entrenamientos cada día y los he hecho todos", señaló el serbio, que ha recibido mucho cariño de sus compañeros en este periodo: "He notado mucho cariño, con mensajes por las redes sociales y llamadas. Es muestra de la familia que es este equipo. La familia se ve cuando las cosas van mal porque cuando van bien todo el mundo es tu amigo. Ahí se ha visto la familia de verdad y quiero agradecerlo a los compañeros porque, gracias a ellos, he podido pasarlo lo mejor posible".

En este sentido, dejó claro que jamás olvidará cómo fue el reencuentro con el equipo en el hotel de concentración. "Llegué al aeropuerto y no sabía si sabrían que iba a llegar en ese momento. Abrí la cortina y estaba todo el club allí. No lo esperaba y tuve unos cuatro o cinco segundos sin saber qué hacer ni qué decir. Menos mal que hay gente que lo ha grabado, porque quiero tenerlo para toda la vida y se va a quedar conmigo. Tienes que tener suerte para vivir esto alguna vez".

En lo deportivo, aseguró estar preparado para darlo todo desde ya si el técnico lo reclama. "El míster ya sabe que he seguido entrenando y que he venido a ayudar al equipo como sea. En el momento que me toque voy a estar ahí para dar el 110%", indicó Gudelj, que hizo referencia al "fútbol-champán" del que tanto se habla en el vestuario: "Decimos mucho eso en el vestuario o tras los entrenamientos. He dicho eso porque los he visto en la tele y ya sabía que teníamos un equipazo, pero hacerlo en momentos difíciles y sin poder entrenar dos semanas juntos por mi positivo... Son cosas que no son fáciles. Tú quieres hacerlo lo mejor posible y preparar el partido, pero había inconvenientes".

En esta línea, reconoció que como espectador ha sufrido más que en el césped, pero también que ha disfrutado mucho con el equipo. "Ver al equipo jugar así en los dos partidos... He visto en el primer partido un fútbol espectacular y en el segundo un fútbol diferente, pero ves al equipo atacando cada minuto con hambre para marcar el gol. He sudado más que jugando y puedo decir que no me gusta verlo en casa porque sabes que no puedes hacer nada. En el campo es otra cosa y lo tienes todo algo más controlado. En casa depende de otros y no puedes animarles ni hablar con ellos. Es lo que más me costó".

Además, insistió en el que encuentra plenamente integrado en el grupo y que siente los colores nervionenses: "Siempre he dicho que voy a ser siempre como soy y quiero agradecer a los compañeros por aceptarme en este grupo. Yo llegué bastante tarde pero se ve que es un grupo espectacular. Esas cosas, el trato de todo el club y todos los aficionados, te hacen sentir en casa. Puedo decir que me siento un sevillista de verdad". 

Tanto es así que el gol de Ocampos ante el Wolverhampton le costó un móvil: "Creo que se me rompió el teléfono. Toda la familia estábamos saltando y celebrando. Fue increíble".