Del tenis a la política

Casper Ruud afronta Roland Garros con ganas de darle un giro a sus resultados. Y visualizando el futuro, reconoce que se le ha despertado un cierto interés por la política

Del tenis a la política
Casper Ruud y Rafa Nadal, en el último enfrentamiento entre ambos, en Bastad (2024). - Cordon Press

Casper Ruud, actualmente octavo en el ránking ATP, es uno de esos tenistas que se moja cada vez que hay un micrófono delante. Sin embargo, hace unos meses que en un tema política y recibió muchas críticas en las redes sociales.

Ahora, afronta Roland Garros con la esperanza de poder mejorar sus últimos resultados y no ha dudado en recordar aquel capítulo en una entrevista en The Guardian, del que tampoco se esconde: "Siempre que dices algo, o tienes algún tipo de opinión pública sobre algo, seguro que alguien vuelve a decir algo sobre tu opinión, y entonces siempre pueden responder. Es como algo interminable, ese es el peligro".

Sobre el motivo de sus declaraciones, también se ha pronunciado: "En los últimos años, viajando, viendo muchas culturas diferentes, he desarrollado un interés por ciertas cosas dentro de la política y he sido sincero cuando me han preguntado. También me he puesto en situación, especialmente cuando se trata de ciertas cosas en el debate político noruego, porque he opinado públicamente en las redes sociales. Siempre voy a intentar dar una respuesta honesta".

A día de hoy, lucha por sobrevivir en el top-10, pese a que en su día fue el gran enemigo de Carlos Alcaraz en la pista. Y de lo que más orgulloso está es de haber pedido ayuda psicológica: "Nunca pensé que necesitaría ayuda de esa manera, pero enseguida me di cuenta de que me beneficiaba de ella y de que fue una decisión inteligente por mi parte abrirme a alguien y pedir ayuda y tener diferentes pensamientos y puntos de vista sobre las cosas. Estoy contento y orgulloso de haberme atrevido a buscar ayuda y de haberme dado cuenta de que era necesario para mí".

En este sentido, afirma que ha cambiado mucho su actitud dentro y fuera de la pista: "A veces tengo que contenerme para no contestar a alguien o comentar algo. Cuando era joven, tiraba demasiado la raqueta. Lloraba, gritaba y me quejaba de todo. Me sentía un poco como si corriera en una rueda de hámster que nunca llegaba a ninguna parte".

Por último, el tenista noruego también ha hecho referencia a su escandalosa derrota frente al italiano Jannik Sinner, actual número uno del mundo, en el Masters 1000 de Roma: "No me siento tan mal, sinceramente. Creo que fue más divertido que nada, aunque perdí 6-0, 6-1. Miras al rival y dices: 'Esto es algo de otro nivel'".