La llama de Novak Djokovic comienza a apagarse

El Masters 1000 de Indian Wells es el primer evento de esta categoría del curso y por su posición en el calendario sirve para dar inicio al momento clave de la temporada, pues tras un inicio de idas y venidas en el calendario, ahora se junta todo. En marzo Indian Wells y Miami; en abril y mayo toda la tierra batida; y en julio la hierba. Y de cara a este momento hay un jugador que está muy lejos de su mejor momento, Novak Djokovic, que bordeando los 38 años no termina de encontrarse y cada vez se ve más cerca del final.

En el Valle de Coachella Nole volvió a la competición tras mostrar una cara regular en Doha, donde retornó tras la lesión del Open de Australia, pero las cosas no le han ido nada bien. En 2024 ya le pasó algo similar en California, donde un 'lucky loser' como Luca Nardi le sorprendió en su estreno y este año se ha repetido la historia. Esta vez ha sido Botic Van de Zandschulp su verdugo. El neerlandés tras perder contra en la previa contra Matteo Gigante entró al cuadro contra Nick Kyrgios y tras superar al mermado 'aussie' superó a 'Nole' en un duelo durísimo.

¿Se acerca el final?

Tras el partido el de Belgrado reconoció su mal momento, que no es de ahora, pues lleva ya tiempo sin alcanzar su mejor tenis. "Las cosas han sido distintas para mí en los últimos dos años. He sufrido para tener el nivel que quiero. De vez en cuando hago unos buenos torneos, pero en general, es un desafío. Es un desafío para mí". Estas declaraciones suenan a que se acerca al final de su carrera y el balcánico no esconde su pesar: "Es lo que es. Nada te puede preparar para estos momentos. Tienes que vivirlos e intentar gestionarlos de la mejor manera".

Eso sí, no puso excusas a su prestaciones en la derrota y se resignó a felicitar a su rival y fustigarse por tener un mal día, aunque si que dio un palo a la organización por las pistas. "Lamento mi nivel de tenis, considerado como he entrenado estos días. Para ser honesto, la diferencia entre la central y las otras pistas es enorme". Y de cara al futuro, que pasa por el Open de Miami en 9 días, Novak no confirmó nada y se limitó a decir que iba a hablar con su entrenador, Andy Murray, para tomar una decisión.