Sinner habla sin tapujos sobre Djokovic tras derrotarle en París

Una de las semifinales disputadas ayer en Roland Garros tenía un cartel digno de la gran final. Una vez realizado el sorteo eran muchos los que soñaron con este partido entre Sinner y Djokovic y, al final, ambos cumplieron con el guion. Compitió el balcánico, pero ganó Sinner por tres sets a cero para demostrar una vez más que los tres meses de inhabilitación por dopaje no le ha afectado para nada.

Tras el partido, el turinés no pudo evitar rendirse en elogios hacia su rival y desmintió la fama que tiene 'Nole' de chulo y egocéntrico para aquellos que no lo conocen todavía: "Me siento un afortunado por haber podido entrenar muchas veces con él. Siempre diré lo amable que es con todo el mundo, creo que la gente no llega a conocer el alcance de su personalidad. Es muy amable, trata de ayudar siempre a los demás. He aprendido mucho de él, vi vídeos de su tenis para mejorar mi rendimiento".

Asimismo y tras las palabras de Djokovic en las que dejaba abierta la posibilidad de que este haya sido su último Roland Garros, el transalpino deseó lo contrario: "Novak ha sido muy importante para que yo mejore como tenista, pero también como persona. Ojalá este no haya sido su último partido en París porque el tenis sigue necesitándole. Es un gran modelo a seguir para todos".

Sobre la final que disputará este domingo contra Carlos Alcaraz, Sinner se muestra confiado en sus posibilidades frente al murciano, al tiempo que está feliz de tenerle enfrente: "Jugar contra él una final de Grand Slam va a ser muy especial. Los grandes partidos son divertidos de jugar, aunque también se sufre. Somos jóvenes, talentosos, diferentes entre sí. Va a ser interesante ver cómo se desarrolla todo. Como en toda gran rivalidad, las cosas se basan en un estudio táctico de lo que puedes hacer, pero has de contar con variaciones porque las cosas pueden cambiar. Hay que estar preparado para todo".

Autoanalizándose, Jannik se define así: "Creo que soy un tenista sólido, pero que a la vez, es impredecible en sus golpes. Eso evita que mis rivales encuentren una solución clara a mi juego. Siento que he mejorado mucho respecto al año pasado en tierra batida, eso forma parte del proceso y solo deseo que el año que viene pueda decir lo mismo. Creo que en el trabajo duro, los resultados son solo una consecuencia de ello".

Por último, cuestionado por si se puede comparar este momento que viven los dos con el del famoso 'Big Three', el italiano prefiere no hacerlo. Al menos, por ahora: "Solo el tiempo podrá decir si establecemos una rivalidad como la del Big 3, pero lo que puedo decir es que él hace que yo sea mejor tenista, me lleva más allá de mis límites y me obliga a entender qué puedo hacer para ganarle en los próximos enfrentamientos. El tenis necesita rivalidades como esta".