El covirán Granada apuesta fuerte con el fichaje de Giorgi Bezhanishvili
El Covirán se hace con un pívot austriaco formado en Estados Unidos y que puede paliar todos los problemas en el juego interior granadino
A la espera de lo que este domingo haga el Hiopos Lleida ante el Casademont Zaragoza, la derrota del Covirán Granada en Málaga (95-78) ante Unicaja le mete en posiciones de descenso en la Liga ACB y le complica mucho un final de temporada de infarto en la parte baja de la tabla, con el Leyma Coruña mejorando desde la llegada de Thomas Heurtel y un Bàsquet Girona que sale provisionalmente del pozo con la gran sorpresa que dio este sábado ante el Joventut.
Ante esto, el equipo granadino ha tomado medidas y este domingo ha anunciado el fichaje, hasta el final de temporada, del pívot georgiano Giorgi Bezhanishvili, que no ocupará plaza de extracomunitario al tener pasaporte austriaco, ya que ha vivido en este país desde los cuatro años.
Bezhanishvili procede del Gravelines Dunkerque francés y se convierte en el segundo refuerzo en los últimos días del Covirán Granada, que incorporó hace poco más de una semana como cedido desde el Baskonia al pívot senegalés Ousmane Ndiaye y que también busca un jugador exterior con el que completar su plantilla para este tramo final.
Más jugadores para Pablo Pin
El georgiano, que puede ocupar las posiciones de pívot y ala-pívot, tiene 27 años, mide 2,08 metros y llegará este mismo domingo a Granada, por lo que el lunes se pondrá a las órdenes del técnico Pablo Pin, según ha hecho público el club andaluz.
Bezhanishvili ha jugado durante la presente campaña en el Gravelines Dunkerque de la Pro A, la primera división francesa, equipo en el que ha promediado 8’1 puntos y 3’9 rebotes en algo más de 20 minutos de media por partido. No obstante, antes de llegar a Francia, Bezhanshvili se formó en la Universidad de Illinois (Estados Unidos) para después jugar en Canadá -en la G-League- y en Taiwán.
Las lesiones han pasado factura en las últimas semanas al cuadro nazarí, que se ha visto obligado a reforzar un roster que estaba muy corto, especialmente tras la importante ausencia de Jacob Wiley. Esta baja se sumaba a la menos importante pero también decisiva de Gian Clavell, por apendicitis, que ha hecho que se pierda varios partidos. Antes de la llegada de Ndiaye, Pablo Pin tan sólo tenía nueve jugadores para rotar y acababa notándolo. Ahora con el senegalés y Bezhanishvili espera cubrir unas posiciones interiores donde más había notado estas carencias.
Los granadinos afrontan un duelo clave para la salvación ante su público, la próxima semana, ante el Hiopos Llieda y esperan contar con estos dos fichajes ya totalmente integrados.