Los Lakers, salpicados por el escándalo de las apuestas en la NBA

Varios empleados de la franquicia californiana han tenido que entregar sus teléfonos móviles para revisar si tuvieron algún contacto con el detenido Damon Jones

Cuando hace unas semanas se destapó el escándalo de apuestas en la NBA y se produjeron las detenciones del jugador de los Miami Heat Rozier o el extécnico Damon Jones, la Liga norteamericana se lo tomó muy en serio. Sabía que lo que había ocurrido era la punta del iceberg, un punto de partida que afectaría a más gente dentro de la Liga y que podría dañar su imagen.

La propia NBA reconoció que había sospechado en años anteriores de Terry Rozier, pero que el jugador se mostró colaborador cuando se le solicitó su teléfono móvil y que el caso había quedado cerrado. Aunque también señalaron que ellos no tenían los métodos coercitivos que sí podía tener el FBI.

La Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) confirmó en ese momento que 34 personas había sido detenidas en esta operación y que, entre ellos, figuraba también otra persona relacionada con la NBA. Damon Jones, exjugador y antiguo entrenador asistente de los Cleveland Cavaliers, había sido detenido por filtrar información sobre los Lakers de la época en la que estuvo vinculado al cuerpo técnico que dirigía Darvin Ham.

Lo que trascendió es que Jones había pasado información a unos conocidos para que apostasen en contra de Los Angeles Lakers en un determinado partido, ya que sabía que LeBron James iba a ser baja. “Apuesta fuerte por Milwaukee esta noche”, fue el mensaje que envío supuestamente, que no sería el único que afectaría a los Lakers y a King James.

Tras conocerse más datos del caso, se ha sabido que Jones no era un simple apoyo para Ham por su amistad previa, sino que era amigo y ejercía de entrenador de tiro del propio LeBron James, lo que indirectamente ha implicado al jugador de los Lakers en el caso. Y ahora, según se ha sabido, podría haber más personas dentro de la franquicia que salieran salpicadas del caso.

La agencia de la NBA investiga a los Lakers

Una información que publica The Athletic confirma que varios empleados de Los Angeles Lakers han recibido la petición de entregar sus teléfonos móviles, documentos y registros de llamadas como parte del proceso de recopilación de pruebas. En este caso, el que está solicitando estos dados es la firma Wachtell, Lipton, Rosen & Katz, que ha sido contratada por la propia NBA para hacer una investigación interna y depurar responsabilidades.

Se sabe que dos empleados de los Lakers, el entrenador asistente Mike Mancias y el administrador ejecutivo Randy Mims, ya han entregado sus teléfonos voluntariamente. Ambos eran cercanos al detenido Jones y la firma quiere comprobar que no hay ninguna conexión.

Estas peticiones no significan que haya alguien culpable en los Lakers, pero quieren comprobar los contactos de todas las personas que hayan tenido alguna relación directa con Damon Jones durante esos meses que se investigan.