Minutos para que Tello vuelva a ser Tello

Por lo general, los futbolistas deben ganarse durante la semana, en los entrenamientos, la titularidad de la que presumirán en el fin de semana. Y no es una excepción el caso de Cristian Tello. Sin embargo, cargado de razón y lógica por el peso específico y el caché del de Sabadell, Quique Setién ha llegado a la conclusión de que el dorsal 20 necesita ya en esta fase de la temporada acumular muchos minutos para que sus principales cualidades (desborde, explosividad, pegada, potencia) salgan a relucir definitivamente. Hay otros jugadores que, sobre todo por su constitución física, esperan su oportunidad en el banquillo hasta que adquieren el tono físico pertinente, pero, en el caso del canterano culé, los cuerpos técnico y médico entienden que se le ha dosificado ya en sus esfuerzos convenientemente, por lo que ahora se encuentra ya a falta únicamente de ritmo, que le otorgará también la confianza para desarrollar su juego.

Y es que, después de lesionarse nada más arrancar la pretemporada (un esguince de grado I-II en el tobillo derecho que se complicó al afectar a los ligamentos, generándole una sindesmosis) y perderse todos los amistosos, Setién midió mucho los tiempos con el extremo, que ya mejoró considerablemente en la semana previa al estreno liguero. De esta forma, Tello integró una convocatoria de 19 a Barcelona, pero terminó siendo el descarte y viendo frustrado, por tanto, su retorno a casa. Le sirvió esta experiencia, lógicamente, para hacer grupo, aguardando al debut en casa contra el Celta para disputar sus primeros minutos con la camiseta verdiblanca. Fueron 24, ingresando en la segunda parte por Francis. En Villarreal, Cristian sí gozó al fin de la titularidad, con un parón internacional de dos semanas que le ayudó considerablemente para ponerse a punto, dejando su sitio en el 78’ a Nahuel.

El siguiente paso sería la disputa de un partido completo. Tendrá la oportunidad, salvo giro mayúsculo en la hoja de ruta trazada por Setién, el próximo sábado contra el Deportivo. Porque, como ya se ha explicado, el míster y sus más directos colaboradores entienden que ha pasado la fase de cautela, de tal manera que toca apretar, especialmente con uno de los futbolistas mejor pagados de la plantilla, que está llamado a ser también de los que marque diferencias sobre el césped.

Además, lo de estar los 90 minutos en el terreno de juego es una situación infrecuente para el catalán, cuyas condiciones le hacen precisamente exprimirse y agotarse antes del final, por lo que, si bien acostumbra a ser titular desde que salió de la entidad azulgrana, suele ser sustituido. En este sentido, siempre superó los 2.000 minutos por temporada (entre todas las competiciones) en sus tres años en el extranjero (dos en Oporto y uno en la Fiorentina), pero ni siquiera alcanzó nunca un tercio de partidos enteros.

En el primer equipo del Barça, sólo fueron 14 de 86 en los tres ejercicios en la elite española, mientras que, con los ‘Dragoes’, acumuló 90 minutos diez veces en la 14/15 (de 37 posibles) y once en la siguiente (de 35). Por último, la 16/17 la saldó como ‘viola’ con trece encuentros compeltos de 42 disputados.

Como ya se explicó en estas páginas, Setién seguirá con Boudebouz el mismo camino trazado con Tello, por lo que su ausencia en tierras castellonenses respondía a la lógica. La idea es que se estrene ante el Dépor en la convocatoria, si no hay contingencias de última hora, e, incluso, que dispute sus primeros minutos en un ambiente favorable que allane su aterrizaje en LaLiga.