Europa apenas se aleja y el Betis ya sabe cómo levantarse

La derrota en el derbi, más allá de la polémica por el dudoso penalti de Bartra sobre De Jong que sirvió al Sevilla FC para abrir el marcador, ha dejado al Betis muy tocado. Y en especial, a su técnico. Los números señalan a Rubi como el entrenador con más de 25 partidos con peor porcentaje de victorias en la historia del Betis en Primera división.
Por ello, no es de extrañar que cada vez cuente con menos opciones de seguir en el banquillo del Villamarín la próxima temporada. El casting para buscarle un relevo está de nuevo en marcha. Pero por delante quedan diez 'finales' y el catalán, salvo catástrofe, acabará la campaña.
Tras el varapalo en el derbi, los más agoreros apuestan por sellar cuanto antes la permanencia, como advirtió el ex bético Capi. Pero la realidad es que la distancia con la séptima plaza, que da acceso a la Europa League, sólo ha crecido un punto y está ahora a 10.
El agónico empate del Levante ayer en Mestalla impidió al Valencia sumar un triunfo que habría dejado a los ches con 12 puntos de ventaja sobre el Betis. Pero con la igualada granota, Europa sigue estando casi a la misma distancia para un conjunto verdiblanco que ya sabe lo que es levantarse tras perder un derbi.
Lo hizo tras caer 1-2 en la primera vuelta. A aquella derrota le siguieron tres victorias consecutivas, lo que supone la mejor racha de toda la temporada, ante Valencia (2-1), Mallorca (1-2) y Athletic (3-2). Un 9 de 9 al que se sumó un empate en la visita al Espanyol (2-2) para enlazar cuatro partidos invicto en LaLiga, que fueron cinco en total tras golear al Antoniano en la Copa del Rey (0-4).
Levantarse del mismo modo se antoja vital para apurar las opciones europeas de un Betis que afronta ahora dos duelos consecutivos ante rivales directos como son el Granada y el Athletic, para a continuación recibir a un Espanyol que pelea por no descender. Tres partidos que pueden ser clave en el devenir verdiblanco. Con 30 puntos por disputar, urge levantarse para que haya una mínima esperanza de que Rubi pueda obrar el milagro que ya hizo el pasado curso ante el Espanyol, con su espectacular remontada final.
Por ello, no es de extrañar que cada vez cuente con menos opciones de seguir en el banquillo del Villamarín la próxima temporada. El casting para buscarle un relevo está de nuevo en marcha. Pero por delante quedan diez 'finales' y el catalán, salvo catástrofe, acabará la campaña.
Tras el varapalo en el derbi, los más agoreros apuestan por sellar cuanto antes la permanencia, como advirtió el ex bético Capi. Pero la realidad es que la distancia con la séptima plaza, que da acceso a la Europa League, sólo ha crecido un punto y está ahora a 10.
El agónico empate del Levante ayer en Mestalla impidió al Valencia sumar un triunfo que habría dejado a los ches con 12 puntos de ventaja sobre el Betis. Pero con la igualada granota, Europa sigue estando casi a la misma distancia para un conjunto verdiblanco que ya sabe lo que es levantarse tras perder un derbi.
Lo hizo tras caer 1-2 en la primera vuelta. A aquella derrota le siguieron tres victorias consecutivas, lo que supone la mejor racha de toda la temporada, ante Valencia (2-1), Mallorca (1-2) y Athletic (3-2). Un 9 de 9 al que se sumó un empate en la visita al Espanyol (2-2) para enlazar cuatro partidos invicto en LaLiga, que fueron cinco en total tras golear al Antoniano en la Copa del Rey (0-4).
Levantarse del mismo modo se antoja vital para apurar las opciones europeas de un Betis que afronta ahora dos duelos consecutivos ante rivales directos como son el Granada y el Athletic, para a continuación recibir a un Espanyol que pelea por no descender. Tres partidos que pueden ser clave en el devenir verdiblanco. Con 30 puntos por disputar, urge levantarse para que haya una mínima esperanza de que Rubi pueda obrar el milagro que ya hizo el pasado curso ante el Espanyol, con su espectacular remontada final.