Jay Vine brilla en la pesadilla española de La Vuelta

Había ganas de que llegase la montaña a La Vuelta a España 2025 y lo hizo con una llegada en Pal que sirvió para coronar al australiano Jay Vine (UAE) como vencedor y 'regalar' el maillot rojo al noruego Torstein Traeen, el mejor clasificado de la fuga del día. Además, vivimos el hundimiento de un Juan Ayuso que se dejó más de siete minutos con los favoritos de la carrera.

Vine, residente en Andorra, siguió la fiesta del UAE con un brillante triunfo en solitario en la sexta etapa, solo un día después del triunfo por equipos en la crono de Figueras. El ciclista australiano atacó en La Comella, subió solo Pal y alzó los brazos por tercera vez en la Vuelta, ya que en 2022 ganó dos etapas.

El escalador de la escuadra emiratí marcó un tiempo de 4h.12.36, a una media de 40,2 km/h. A 54 segundos llegó el nuevo líder, el noruego Traeen, el gran beneficiado del día. Luego Fortunato a 1.10 y el español Pablo Castrillo, quien no pudo reeditar sus éxitos de 2024, si bien aún tiene tiempo para resarcirse.

En cuanto a los favoritos, estos se lo tomaron con calma. Ciccone apretó a Vingegaard, pero entre ambos no fueron capaces de descolgar al resto. Llegaron junto al grupo de Almeida y Bernal a 4.19. Juan Ayuso pagó su 'desfallecimiento' en la subida perdiendo casi 8 minutos respecto a sus rivales directos.

Más allá de que se esperase pelea por la general, lo que estaba claro tras pasar La Seu d'Urgell, km 126, es que el triunfo de etapa estaba en la fuga. Los favoritos se desentendieron de ese botín cediendo 6.34 minutos a falta de los ascensos La Comella y Pal, justo al paso por la frontera hispano-andorrana. En el primero de ellos el retraso bajó a 4, pero la suerte ya estaba echada.

Fue justo a metros de coronar La Comella (4.2 km al 8 %) cuando atacó el escalador australiano Jay Vine, doble ganador de etapa en la Vuelta. Un zarpazo y un descenso de alto riesgo puso al compañero de Ayuso con ventaja para afrontar el definitivo ascenso a Pal, puerto que volvía a la Vuelta tras 15 años de ausencia. Allí, lejos de perder ritmo, fue capaz de mantener siempre su renta en torno al minuto para alzar los brazos en línea de meta.

Este viernes 29 de agosto, segundo asalta pirenaico

Este viernes se disputará la séptima etapa, entre Andorra la Vella y Cerler, de 188 km, segunda jornada de montaña con cuatro puertos y la meta en alto. El pelotón afrontará de inicio el Port del Cantó (24,7 km al 4,4), después hacia el ecuador del recorrido La Creu de Perves (5,7 km al 6,3), luego el Col de L'Aspina (7,1 km al 5,5) y la ascensión final a la cima oscense de Cerler (12,1 km al 5,8), a 1.905 metros de altitud.