Como en la pasada edición,
Ocampos evitó en la
prórroga el
descalabro a las primeras de cambio del
Sevilla FC en la
Copa del Rey, primerísimas en esta ocasión, pues entonces fue en la tercera ronda cuando una contra del argentino en
Leganés impidió la sorpresa, que acarició este miércoles el
Córdoba durante 107 minutos. De menos a más, los de
Lopetegui, especialmente con las salidas de Lucas,
Rafa Mir y su compatriota
'Papu' Gómez, fueron acumulando méritos y arrinconando a su rival hasta conseguir una renta pírrica que, aunque vale, no dejará contento a nadie en el Sánchez-Pizjuán. Un
aviso a navegantes, felizmente sin consecuencias, pues los blanquirrojos estarán en el
bombo.
Arrancó fuerte el anfitrión, apretando arriba para
complicar la salida nervionense. De hecho, antes de cumplirse el tercer minuto, una combinación entre los ex blanquirrojos
Casas y Simo provocó la salida de
Dmitrovic, bien abajo para evitar males mayores. Respondieron enseguida los de Lopetegui con dos
transiciones rápidas sin demasiado peligro, la segunda gracias al cruce de
José Ruiz ante Idrissi, que buscaba el pase de la muerte desde la línea de fondo de Montiel. Los visitantes habían decidido calcar ese achique en campo contrario para
equilibrar fuerzas y sensaciones. Antes del cuarto de hora, Iván Romero reclamó penalti por una entrada en el área de Toni Arranz, pero Gil Manzano, sin ayuda del VAR en esta primera eliminatoria, no señaló nada.
La más
clara llegaría a renglón seguido: paradón del cancerbero serbio a cabezazo de
Puga, que remató un buen centro, tras mejor acción personal, de
Simo. No terminaba de encontrarse cómodo el Sevilla con la
verticalidad y la pujanza califales, fruto de la
convicción de que todo puede pasar a partido único y con el
factor campo de tu lado. En el 22, una nueva caída en la zona de castigo, esta vez de
Óscar Rodríguez ante José Cruz, advertido por el colegiado extremeño para que no intentara engañarle.
Gudelj, dolorido tras una fea entrada del ex canterano hispano-marroquí, tuvo que retirarse, aunque intenta aguantar.
En el 27,
Idrissi lo intentó desde lejos, despejando con apuros
Felipe Ramos. Lo imitó Óscar, conscientes los nervionenses de que, ante los problemas para crear
peligro de otra forma, había que buscarlo desde larga distancia. A nueve del intermedio, los de Lopetegui llegaron en jugada más elaborada, merced a la apertura del marroquí de origen neerlandés para que
Rekik la pusiera al primer palo y el remate de
Iván Romero se marchara fuera por poco. En el 42,
Munir cabecea libre de marca a bocajarro una falta, pero responde bien el portero del Córdoba, que salió bien de su zona de confort a continuación para meter los puños en una acción idéntica desde el costado opuesto.
La reanudación arrancó con doble cambio foráneo, pues
Diego Carlos entró por el renqueante Gudelj y
Ocampos relevó a Idrissi para que la alineación fuese más titular y, a priori, competitiva. Y el movimiento, al menos, obró la reacción nervionense, con iniciativa de un Sevilla más
directo e impetuoso. A los siete minutos,
Iván Romero anduvo cerca de aprovecharlo, por sorpresa y
desde el suelo, tras caer por un empujón en el área y rematar de manera
heterodoxa para que el balón rebotara en el poste y se paseara por la línea de gol.
El juego volvió a igualarse con los cambios, de enjundia (salvando las distancias), pues Lopetegui recurrió a
Rafa Mir y el
'Papu' Gómez ante la inminencia de la prórroga, mientras que el Córdoba recurrió a su 'pichichi'
Willy. Este último estuvo a punto de aprovechar una
mala cesión de Jordán, al tiempo que el murciano vio cómo se le anulaba un gol por clarísimo
fuera de juego cuando remató de cabeza. La ofensiva nervionense, con más corazón que cabeza, continuó, mientras que su anfitrión buscaba la contra. A doce del epílogo,
José Ruiz se cruzó bien 'in extremis' ante
Munir, jugada
idéntica a la que protagonizó
Alonso con Ocampos poco después.
Ya en el primer minuto de los cinco de alargue, el cancerbero local tuvo que mandar con
apuros a córner un disparo del internacional marroquí, que había recibido del
Papu. Pero nada pudo evitar el tiempo extra, que arrancaría con sendas intentonas de
Rafa Mir, la primera de cabeza (
al palo, aunque estaba en fuera de juego de nuevo) y la segunda, de zurdazo que merodeó la madera. Un
asedio en toda regla que no terminaría ahí, porque el Sevilla, de una vez por todas, parecía ir
con todo y de verdad a por la clasificación.
Óliver, desde lejos, lo volvería a intentar sin acierto. El anfitrión, ya
cansado y resignado, esperaba su oportunidad a balón parado o en una transición.
El 'Papu', que
revolucionó desde su salida el ataque blanquirrojo, estuvo cerca de sorprender a
Felipe Ramos en el 99, si bien el '1' califal volvió a imponerse por bajo. Parecía fiarlo todo ya a unos hipotéticos
penaltis el conjunto de Crespo. Pero, nada más arrancar la segunda mitad de la prórroga,
Ocampos ganó un balón largo al espacio, burló la salida del meta local y definió a puerta vacía para arreglar el
desaguisado a tiempo. Incluso,
Rafa Mir pudo ampliar la renta, pero esta vez Felipe reaccionó a la perfección. Como en la pasada edición, el extremo argentino acudía al rescate de su equipo sobre la bocina, aunque ahora a las primeras de cambio. Pese a los intentos
a la desesperada de los blanquiverdes, no se movería más el marcador.
FICHA TÉCNICA.-
Córdoba CF: Felipe Ramos; José Ruiz, José Cruz, Alonso, Ekaitz Jiménez; Puga (Luismi 62'), Toni Arranz (Ale Marín 110'), Javi Flores, Simo (Cristian 110'); Antonio Casas (Omar 69') y Fuentes (Willy 62').
Sevilla FC: Dmitrovic; Montiel, Gudelj (Diego Carlos 46'), Rekik (Koundé 91'), Augustinsson; Delaney (Joan Jordán 38'), Óliver Torres, Óscar Rodríguez ('Papu' Gómez 73'); Munir, Idrissi (Ocampos 46') e Iván Romero (Rafa Mir 67').
Árbitro: Gil Manzano (extremeño). Amarillas a los locales Javi Flores y Toni Arranz, así como a los visitantes Joan Jordán, Diego Carlos, Óliver Torres, 'Papu' Gómez y Ocampos.
Gol: 0-1 (108') Ocampos.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera eliminatoria de la Copa del Rey (a partido único), disputado en el Estadio Nuevo Arcángel de Córdoba ante más de 16.000 espectadores.