Escribano, sustituto de El Juli, acaricia la Puerta del Príncipe
Buen sabor de boca para concluir la Feria. Manuel Escribano, un torero de esta tierra que no aparecía en los carteles, se convirtió en el gran protagonista de la corrida que cerraba la gran semana de Sevilla: la de Miura. El de Gerena, que entró en la corrida en sustitución de El Juli, ya recibió una ovación en el tercer toro de la tarde, pero fue en el sexto en el que enamoró al público de La Maestranza.
Su faena a Datilero fue merecedora de las dos orejas que mostró al tendido. Su faena de muleta, al son de la música, es de las que se recordarán mucho tiempo. Rozó la Puerta del Príncipe y no la logró, pero bien que se ha ganado el respeto de los entendidos y, con suerte, más de un contrato. Sus dos compañeros en la terna, Rafaelillo y Castaño, también rayaron a gran altura en los de sus lotes, aunque se fueron de vacío.
Dignos rejones
Previamente, por la mañana, se vivió una entretenida corrida de rejones. A pesar del mal juego de los toros de Benítez Cubero, los seis jóvenes jinetes (Luis Valdenebro, Francisco Palha, Manuel Manzanares, Álvaro Montes, Joao Moura y la amazona francesa Lea Vicens) cumplieron. Incluso, hubo oreja para Palha y Valdenebro.
El Juli se recupera
Por otro lado, el torero al que suplió Escribano, Julián López ‘El Juli’, vivió el sábado por la noche unas horas difíciles, cuando se produjo un sangrado muscular y tuvo que ser de nuevo intervenido. Por fortuna, ayer se recuperaba “muy bien” tras el “súbito contratiempo”, según aseguraba el cirujano jefe de la Maestranza de Sevilla, Octavio Mulet Zayas.
Mulet explicó ayer que la exploración quirúrgica que se le practicó de urgencia al torero confirmó que sufría un sangrado “muscular” que “gracias a Dios” no estaba relacionado con la lesión vascular causada por la cornada que sufrió el pasado viernes cuya corrección permanece “estable”.
Su faena a Datilero fue merecedora de las dos orejas que mostró al tendido. Su faena de muleta, al son de la música, es de las que se recordarán mucho tiempo. Rozó la Puerta del Príncipe y no la logró, pero bien que se ha ganado el respeto de los entendidos y, con suerte, más de un contrato. Sus dos compañeros en la terna, Rafaelillo y Castaño, también rayaron a gran altura en los de sus lotes, aunque se fueron de vacío.
Dignos rejones
Previamente, por la mañana, se vivió una entretenida corrida de rejones. A pesar del mal juego de los toros de Benítez Cubero, los seis jóvenes jinetes (Luis Valdenebro, Francisco Palha, Manuel Manzanares, Álvaro Montes, Joao Moura y la amazona francesa Lea Vicens) cumplieron. Incluso, hubo oreja para Palha y Valdenebro.
El Juli se recupera
Por otro lado, el torero al que suplió Escribano, Julián López ‘El Juli’, vivió el sábado por la noche unas horas difíciles, cuando se produjo un sangrado muscular y tuvo que ser de nuevo intervenido. Por fortuna, ayer se recuperaba “muy bien” tras el “súbito contratiempo”, según aseguraba el cirujano jefe de la Maestranza de Sevilla, Octavio Mulet Zayas.
Mulet explicó ayer que la exploración quirúrgica que se le practicó de urgencia al torero confirmó que sufría un sangrado “muscular” que “gracias a Dios” no estaba relacionado con la lesión vascular causada por la cornada que sufrió el pasado viernes cuya corrección permanece “estable”.