Betis, Sevilla y toda la sociedad hispalense arropan a la familia de Sandra Peña, la malograda jugadora del Honeyball

Luto en la capital hispalenses y, por añadidura, en toda la provincia, en Andalucía y en España tras el desgraciado suceso producido este martes 14 de octubre, cuando la jovencísima Sandra Peña, alumna del Colegio Irlandesas de Loreto, se quitaba la vida al salir de clase precipitándose desde un balcón, presuntamente a raíz del acoso escolar que sufría por parte de unas compañeras de su mismo centro desde hacía meses y que ya había sido denunciado por sus padres. Precisamente ellos han querido que se difunda la imagen de su hija para que no se borre su sonrisa, ésa que le quitaron otras menores al burlarse de su físico, y con el fin de que se depuren responsabilidades. La Cadena Ser avanzaba este jueves que la Junta de Andalucía, tras una visita de su equipo de Inspección Educativa al recinto, de carácter concertado, ha decidido denunciar ante la Fiscalía la no apertura del protocolo anti-bullying, mientras que el Defensor del Pueblo sigue investigando los hechos.

El club de cuyo equipo juvenil era jugadora Sandra, el CD Honeyball (con sede en la calle Hespérides), iniciaba una ronda de pésames al que se han unido las secciones femeninas de las dos grandes instituciones de la ciudad, Real Betis (del que era seguidora la malograda sevillana) y Sevilla FC, unidos en sus condolencias y en apoyo a sus allegados. También se sumaron diferentes personalidades y personas anónimas, que denuncian otro terrible episodio de violencia en las escuelas. Ha dado voz a la familia José Manuel López Viñuela, muy a su pesar presidente de Asociación Trencats contra las Violencias en las Escuelas. Graduado Social y perito en Dirección Centros Educativos y Acoso Escolar, es el padre de Kira López, la joven catalana que en mayo de 2021, cuando apenas contaba con 15 años, se suicidó de manera similar y por causas idénticas, a falta de que en este caso termine todo el proceso policial y judicial para dirimir posibles penas o sanciones.

Las hermandades del Cerro del Águila y de San José Obrero, a las que la joven delantera estaba muy ligada, elevan una oración por su alma y su eterno descanso, dando fe de su profunda consternación por unos hechos que han despertado, lógicamente, la atención de muchos medios de comunicación nacionales. Cuando pasen los días y el asunto, por desgracia, se olvide, solapado por otros de mayor actualidad, quedará, gracias a sus progenitores, la imagen de Sandra Peña en las retinas de todos. Al menos, hasta que, de alguna forma, se haga justicia. Justicia terrenal, se entiende. Desde ESTADIO Deportivo, descansa en paz por fin, pequeña.