Simeone lo deja

El entrenador argentino del Atlético de Madrid es muy supersticioso, sobre todo si se trata de partidos clave como las semifinales de Copa

El Atlético de Madrid es el último equipo que ha vencido al FC Barcelona de Hansi Flick, algo que hizo el pasado 21 de diciembre en Montjuïc (1-2). Este martes, azulgranas y rojiblancos se vuelven a ver las caras en la ida de las semifinales de la Copa del Rey, aunque en esta ocasión Diego Pablo Simeone tiene un as bajo la manga.

Barça y Atlético son enemigos íntimos en el llamado torneo del KO, donde se han enfrentado en 22 eliminatorias y dos finales en los últimos cien años. De hecho, el primer enfrentamiento data de abril de 1925. Desde entonces, el Barcelona ha ganado 13, el Atlético nueve y, en el balance definitivo, los azulgranas han conseguido 22 victorias y han sumado nueve empates; los colchoneros han logrado 15 triunfos.

Hace dos meses, el Atlético de Simeone ganó por primera y única vez en terreno del Barcelona. No lo había hecho antes a lo largo de sus 17 visitas anteriores. Había perdido 10 y empatado siete hasta aquel 1-2 del contragolpe culminado por Alexander Sorloth en el último minuto de partido, y eso que Simeone no tenía su arma secreta.

Para la visita de este martes, el 'Cholo' tirará de sus mejores recursos: Los 19 goles de Julián Álvarez, la visión de Antoine Griezmann, la inspiración de Rodrigo de Paul, el vértigo de Giuliano Simeone, la solidez defensiva o el poder goleador de Sorloth y Correa desde el banquillo, pero sobre todo lo que hará Simeone es dejar el traje.

El entrenador del Atlético de Madrid es muy supersticioso, sobre todo en momentos cruciales de la temporada. Este curso, el 'Cholo', que siempre ha vestido con un impecable traje negro, ha cambiado la chaqueta por el chándal en todas las rondas de la Copa del Rey, lo que le ha traído suerte. Vic, Cacereño, Marbella y Getafe han sido las víctimas de los rojiblancos y el chándal de Simeone, que seguro que hoy vuelve a dejar el traje en el armario en busca de toda ayuda posible ante el equipo de Hansi Flick.

No renuncian a nada el Atlético ni Simeone. Su ambición lo propone para sentirse capaces de todo. También son sabedores de la dificultad de la eliminatoria. La Copa del Rey fue el principio de todo en esta era de 'cholismo', pero no la gana desde el 2013 en el Santiago Bernabéu. Son sus segundas semifinales seguidas, aunque en la anterior fue zarandeado por el Athletic en la vuelta en San Mamés con un ruidoso 3-0.