La cumbre de la ONU de Sevilla, ‘en peligro’

Sevilla es una de las grandes ciudades de España en todos los sentidos. A nivel de población desde luego, pero también a nivel de importancia, de cultura, de afluencia de turismo o de relevancia internacional. Esto se ha visto en dos eventos muy importantes. El primero se dio en 2023, con la celebración de los Latin Grammy, que se hicieron por primera vez fuera de Estados Unidos. Y ahora, un año y medio después prácticamente de nuevo la capital hispalense se va a convertir en el foco internacional, pero esta vez por cuestiones políticas, es decir, aun más relevantes si cabe.

La cuestión es que entre el 30 de junio y el 3 de julio se celebrará una cumbre de la ONU, concretamente, la IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo. Toda la ciudad establecerá un plan de seguridad especial así como de transporte para que todo transcurra con la mayor normalidad posible. Son más de 200 representantes de diferentes países los que estarán esos días en la ciudad andaluza. Lo que muchos no saben es que durante la cumbre se van a enfrentar a la primera ola de calor extrema del verano, con temperaturas a las que pocos estarán acostumbrados.

La primera de muchas

Desde hace algunas semanas Sevilla ya estaba teniendo temperaturas propias más de meses como julio o agosto. Es cierto que el calor ha tardado algo en llegar, es decir, ha sido un mes de mayo bastante fresco para la capital, pero cuando el calor ha llegado, lo ha hecho con muchísima fuerza. El problema sobre todo está en las noches, donde las temperaturas a penas disminuyen y eso convierte el simple hecho de dormir en una tarea arduamente complicada. Sin embargo a esto en parte están acostumbrados los sevillanos, que además en cuanto pueden salen de la ciudad en busca de las playas. A lo que no están tan acostumbrados, además tan pronto, es al calor extremo que se va a sufrir en las próximas semanas.

Y si no están acostumbrados, muchos menos lo estarán algunos de los representantes que visitarán la ciudad para la cumbre de la ONU. Y es que se habla de temperaturas máximas que podrían alcanzar los 44 grados, pero también de mínimas que podrían quedarse muy cerca de los 30 grados, es decir, mucho más que una simple noche tropical. Además el problema está en que este episodio va a ser bastante largo, hasta el punto de que podría alargarse entre el 27-28 hasta mínimo el 4 de julio. De hecho en la ciudad, el día antes de la llegada de los comisarios, se esperan 44 grados y una mínima de hasta 26 grados. El punto más álgido se vivirá en la madrugada del 1 de julio cuando las temperaturas mínimas podrían quedarse en 28 grados en localidades como Osuna.