Adiós a sacar dinero como se solía hacer: todo cambiará el 28 de junio

Está claro que las nuevas tecnologías ya no son tan nuevas. Es decir, lo que eran hace 5 años las herramientas más novedosas y que pocas personas sabían utilizar, hoy están totalmente integradas en la vida diaria de prácticamente toda la población. Y es que buena parte de esa población ha adquirido una gran capacidad para actualizarse y para añadir en su día a día los avances. Es decir, ya no cuesta tanto adaptarte a una nueva tecnología, y el ejemplo más claro está en la inteligencia artificial, que la mayoría de personas ya han aprendido a usar y se han dado cuenta de las ventajas que puede tener. Sin embargo, esto no ocurre igual para todas las personas. Hay una cierta parte de la sociedad, que además es cada vez mayor debido al aumento de la esperanza de vida y al descenso de la natalidad, que no tiene tanta capacidad para adaptarse a los cambios, es decir, nuestros mayores.

Se trata de personas que, por su edad, por cómo ha transcurrido toda su vida, no han desarrollado las capacidades para que puedan adaptarse a esas tecnologías. Y realmente no se trata solo de los más mayores, de los abuelos con 80 años. Hay también una parte de la población que con 60-70 años no sabe utilizarlos porque su vida se ha desarrollado lejos de las nuevas tecnologías por su estatus social, y ahora no son capaces de adaptarse. Uno de los ejemplos que a muchas personas sigue constándole trabajo, aunque ya parezca incluso anticuado es sacar dinero de los cajeros. Las nuevas generaciones ya ni siquiera utilizan efectivo, en cambio otras personas sí lo hacen y les genera mucha dificultad. Sin embargo, eso va a cambiar a partir de este próximo 28 de junio.

Personas mayores o con discapacidades

Se trata de un cambio bastante importante en los cajeros automáticos, que ya no serán como antes. Y es que aunque parezca mentira, el efectivo sigue siendo el método de pago más usado en España, por eso la banca española centra sus esfuerzos en que cualquier persona pueda acceder a ese dinero. Y para eso se aprobó la ley de accesibilidad que se aprobó en 2023, pero que entrará a finales de este mes en vigor.

Algunos de los cambios más importantes serán el aumento del tamaño de la letra para personas con dificultad de visión; la mejora de los iconos para que sean lo más intuitivo posible; la inclusión de auriculares para acceder a instrucciones de voz; o la disponibilidad de personal capacitado para ayudar a personas con discapacidades. Se trata de una transformación que se hará poco a poco porque habrá que cambiar los que ya existían, además de implementar los nuevos. En este trabajo han destacado por ejemplo CaixaBank cuyos cajeros ya son accesibles en casi el 100% de los casos, incluyendo más de 8.000 de ellos con vídeos explicativos en lenguaje de signos.