Bruselas pone a prueba a España
Desde la Unión Europea se ha lanzado una prueba tanto a España como a otros cuatro países para garantizar la seguridad

La tecnología en cuanto a internet se refiere es probablemente el avance más importante de la historia de la humanidad. Es entendible que haya quien pueda discutirlo debido a que hay otros avances, tan básicos como la rueda, que cambiaron por completo la vida de cualquier ser humano, y sin los cuales hoy en día no sería posible nada. Pero internet puede estar al nivel de esos inventos por la rapidez con la que se extendió y por como en cuestión de pocos años todo el mundo aprendió a usarlo. La única diferencia es que los inventos de antes se creaban para cubrir necesidades básicas, mientras que internet no responde exactamente a esa cuestión.
Pero, aun así, revolucionó por completo la vida de todo el planeta. Hoy en día se han normalizado y no se tienen nada en cuenta acciones que hace algo más de 20 años eran casi imposibles. Poder buscar en cuestión de segundos cualquier palabra o cualquier duda, a principios de este siglo parecía algo de película futurista, pero además de algo más que lejano. En cambio, todo eso llegó, y al tenerlo tan cerca no se valora. De hecho, tenerlo tan cerca y poder acceder a todo con tanta facilidad se ha convertido incluso en un problema, sobre todo para los más pequeños. En esa línea están las últimas políticas internacionales, en establecer límites a internet para proteger a los menores de cuestiones como la pornografía u otros contenidos que pueden afectar a su desarrollo. Y por eso España va a ser puesta a prueba junto a otros 4 países.
Verificación de edad
En muchas de las plataformas que están teóricamente reservadas para mayores de edad, se establece una verificación de edad. Sin embargo, este paso no requiere ninguna verificación real, cualquiera, aunque sea menor puede aceptarlo y entrar. Es por eso que desde la Comisión Europea se están implementando medidas en la línea de la Ley de Servicios Digitales, para que se garantice que el usuario tenga que verificar que es mayor de 18 años. Desde el Ejecutivo ha establecido las líneas de prueba a cinco países: Grecia, España, Italia, Francia y Dinamarca. Aunque la verificación es la base de estas medidas, se buscan también otros aspectos, siempre con la protección del menor como horizonte a seguir. El primero es eliminar los mecanismos que puedan generar efectos adictivos, porque los menores son más vulnerables a ellos. El segundo punto es tratar de controlar y eliminar el ciberacoso, que se ha vuelto muy común por las personas que se esconden tras un usuario sin nombre y sin identificarse. El tercer punto