Consejos para evitar las estafas online

Desde los inicios de la humanidad los avances técnicos y tecnológicos han ido marcando el desarrollo de la vida. Sin embargo, hace algunos siglos los avances llegaban muy lentos, había que esperar décadas y décadas para que se produjera algún cambio que fuera realmente sustancial. Pero eso ha cambiado bastante porque en la actualidad hay algunos avances que en cuestión de cinco años han pasado de ser la mayor novedad a ser algo casi antiguo, que para las nuevas generaciones suena casi medieval. Un ejemplo de como los cambios se implementan con gran velocidad son las compras por internet. Hace ya algunos años que se había hecho normal pedir objetos de manera online, pero eran sobre todo algunos objetos difíciles de conseguir en un lugar en concreto o alguna cuestión semejante.

No obstante, desde la pandemia del COVID, con el confinamiento y el miedo por contagiarse, las compras por internet se multiplicaron muchísimo incluyendo cualquier tipo de compra incluso de objetos que cualquier persona pueda encontrar en alguna tienda cercana a su casa. Tanto la simple pereza como la rapidez de algunas plataformas de compra han hecho que se haya convertido en una práctica más que habitual. Y eso, aunque buena parte de la población se ha acostumbrado a hacerlo, muchos siguen cayendo en estafas, por eso es importante tener en cuenta algunas maneras para evitarlas.

Cómo protegerse

• Usar métodos de pago con protección al comprador

Hay muchas formas de pago que también se han generalizado, como pueden ser el Bizum, y precisamente por su sencillez pueden ser muy peligrosos. En cambio, otras plataformas como PayPal ofrecen herramientas para poder recuperar el dinero en caso de que se produzca una estafa y por tanto deberían ser siempre la primera elección para efectuar un pago.

• Desconfiar de los enlaces en redes sociales

Dentro de estas estafas una parte muy importante consiste en compartir enlaces falsos. Se trata básicamente de disfrazar de oficial una publicación de redes sociales o de algún correo donde promocionan un producto. En muchas ocasiones se trata de empresas que realmente no existen y por lo tanto cuando lo pagas, prácticamente desaparecen del mapa.

• Comprobar la seguridad de la web

Puede parecer algo menos importante, pero con mucha frecuencia se entra en páginas que no tienen un cifrado seguro. Para ello existen muchos antivirus y protectores tanto para ordenadores como dispositivos móviles que avisan cuando una dirección cumple los criterios necesarios. Además de lo que es la propia web, hay otras formas de analizar la seguridad. Un ejemplo muy básico puede ser que se encuentren de manera clara los protocolos en caso de devolución, por ejemplo.