El truco de los conductores para evitar los radares de velocidad

Muchos conductores británicos llevan varios años haciéndolo a través de placas que no permiten hacer las fotografías, la DGT teme que llegue a España

El truco de los conductores para evitar los radares de velocidad
El truco para evitar las multas - FreePik

Los radares de velocidad son una de las herramientas más usadas y que más beneficio generan a las arcas del Estado, así como las que más preocupan a los conductores. De hecho, es muy típico que los conductores con mucha experiencia conozcan a la perfección donde se encuentran los radares, incluso los que están más escondidos, para levantar el pie del acelerador en el momento indicado, pero luego reanudar a mayor velocidad. Porque eso está claro, la gran mayoría de conductores de este país, y de muchos otros, suelen ir a velocidades más altas de la permitida, y solo van más despacio cuando puede suponer sanción para ellos, tanto económica como de puntos del carnet o algo semejante. Se trata de una preocupación tan extendida para algunos conductores, que incluso existen aplicaciones y foros especiales centrados en avisar donde se encuentran los radares, así como alarmar si se establece algún radar nuevo o temporal. Es por eso por lo que en algunos países se lleva algún tiempo implementando una táctica para evitarlos y poder continuar a altas velocidades sin tener consecuencias legales ni económicas.

Placas fantasma

El país donde más se ha extendido una táctica para evitar los radares es Reino Unido, con matrículas ilegales que cada vez son más usadas. Según algunos medios de comunicación británicos se trata de matrículas que funcionan como reflejo. Es decir, lo que se hace es que funcionan como un flash que repele la cámara y por tanto dificulta que se haga la fotografía de la matrícula, que se lean los números y las letras necesarias para identificar el vehículo y a su conductor. Ya hace algunos años que este problema se viene tratando en Reino Unido, concretamente hace dos años ya se planteaba que 1 de cada 15 conductores lograba burlar los sistemas de multas de esta manera.

No se trata del único método utilizado para tratar de eludir las cámaras de seguridad. En ocasiones se clonaban matrículas para que identificara a otro vehículo, así como las placas ocultas. De hecho cabe destacar que también se usan este tipo de métodos para evitar las sanciones por las zonas de bajas emisiones. En casi toda Europa se están implementando ya estas zonas a las que solo pueden entrar determinados coches según su fecha de matriculación, por lo que contaminan. Y en esas ciudades se establecen cámaras que delimitan las zonas de manera que cuando un coche entre y no tenga el distintivo, en España, de que puede entrar, sería multado. Para evitar este tipo de estrategias, en algunas ciudades se ha implementado tecnología avanzada para capaz de detectar las placas manipuladas, que pueden acarrear multas de más de 100€.