Matalascañas impone una tasa a los sevillanos

La localidad onubense ha creado una nueva tasa de aparcamiento para los turistas, muchos de ellos sevillanos, a partir de 2026

Matalascañas impone una tasa a los sevillanos
Matalascañas impone una tasa a los sevillanos - Ayuntamiento de Almonte

Matalascañas es una población situada al lado del Parque Nacional de Doñana y perteneciente a Almonte que se ha convertido en uno de los grandes centros turísticos de la provincia de Huelva, ya que se trata de la playa más cercana a Sevilla.

El aumento de la población en verano debido al turismo ha llevado al Ayuntamiento de Almonte a crear una tasa de aparcamiento para turistas que entrará en funcionamiento en el verano de 2026.

Esta tasa, que funcionará como una zona azul, estará en vigor durante los meses de temporada alta, es decir, entre el 15 de junio y el 15 de septiembre. Por la misma se verá afectado todo el casco urbano de Matalascañas, sobre todo las calles más próximas a la playa.

Desde el consistorio han explicado que esta medida busca "reducir la saturación del tráfico, favorecer la rotación de vehículos y fomentar el uso del transporte público". Además, los residentes censados en la localidad almonteña no tendrán que pagar nada, pero sí deberán hacerlo los miles de turistas que acuden a la ciudad cada verano e incluso quienes tienen allí su segunda residencia.

La idea del Ayuntamiento es crear aparcamientos en la entrada de Matalascañas que conectará con la zona del centro y la playa con autobuses lanzadera.

La propuesta de Francisco Bella, alcalde de Almonte, fue adoptada el pasado 3 de julio, después de recibir una nueva resolución del Tribunal de Recursos Contractuales de la Junta de Andalucía que cuestiona el procedimiento de licitación realizado por el Consistorio que gobierna el partido independiente Ilusiona.

Según la licitación, se estiman 6.600 plazas de aparcamiento catalogadas en tres zonas distintas. La primera de ellas, que estarán a un máximo de 250 metros de la playa, la primera hora costará 1,60 euros, mientras que la jornada completa ascenderá a 9,50 euros. Los residentes pagarán 2 euros al día en esta zona. En la segunda, con los aparcamientos entre los 250 y 500 metros de la playa, los primeros 35 minutos tendrán un coste de 0,80 euros, una hora costará 1,30 euros, dos horas 2,30 euros y el máximo permitido de tres horas supondrá 3,30 euros. Los residentes abonarían 1,20 euros al día en esta zona. Por último, en la zona más alejada de la playa, los primeros 35 minutos costarán 0,70 euros, una hora 1,10, sumándose un euro por cada hora adicional hasta el máximo permitido de tres horas (3,10 euros). Los residentes pagarán un euro al día en esta zona más alejada.

El malestar en Matalascañas por esta medida es evidente, habiéndose convocado una manifestación con el lema "¡Matalascañas no se vende!" para protestar por esta "imposición" del alcalde.