De poder protagonizar una película a arrepentirse de entrar en Marvel

Las franquicias en la industria del cine son muy importantes tanto para los espectadores como para la audiencia. Para la audiencia una franquicia supone en muchos casos identificarse con ella, casi hacerla una parte la personalidad. Esto es en los casos más destacados, pero, aun así, es cierto que conseguir que una persona se sienta casi parte de la película, es lo más importante y sobre todo lo más beneficioso para la industria. Además de la audiencia, también suele ser muy importante para los propios actores. Cuando se habla de franquicia del cine, se hace referencia a algo más que una saga o una serie de películas, se trata de un verdadero conglomerado de películas, y en algunos casos incluso de series. Un ejemplo perfecto de esto es Marvel, que tiene un poder increíble en la industria.

Por lo tanto, si llega a poder denominarse franquicia, supone que hay un gran reconocimiento detrás. Por eso los actores en muchas ocasiones se pelean por conseguir un puesto en una de esas películas o series, para que puedan obtener más reconocimiento del que ya tienen, para que la audiencia los pueda reconocer como un personaje en concreto. Porque, aunque esto último puede encasillar al actor, en ocasiones hace que la persona se gane un nombre dentro del mundo del largometraje. A pesar de todo esto, no es oro todo lo que reluce, y detrás de las grandes franquicias, existen también grandes sombras. Es por eso por lo que muchas personas se niegan a participar en las películas, y otros que sí lo participan, se arrepienten de hacerlo.

“No es mi tipo de película”

Uno de los grandes nombres dentro de Marvel es el de Spiderman. En sus tres versiones diferentes y a pesar del paso de los años, se trata de uno de los grandes héroes creados por Stan Lee. La segunda de sus entregas en la gran pantalla fue ‘Amazing Spiderman’, protagonizada por Andrew Garfield, que tuvo un cierto éxito, pero en la que su tía May, no parecía estar tan cómoda. Sally Field fue quien dio vida a este personaje tan importante para la vida del ‘hombre araña’. La actriz ha asegurado en un programa que se unió a la película para “trabajar con una amiga”. La productora del largometraje era una buena amiga suya y quería ayudarla y trabajar con ella.

Una de sus principales quejas va orientada a que a penas podía darle vida a su personaje. Es decir, con la cantidad de sucesos que ocurren en la vida del protagonista, no quedaba tiempo para darle matices al personaje de su tía, porque además habrían pasado desapercibidos. Pero no todo son críticas, porque realmente esta orientada hacia el propio personaje, es la única que ha realizado. Para evitar polémicas además aseguró que tiene una buena relación con Andrew y que disfrutó del rodaje. Es por eso por lo que en 2014, cuando se filtró una posible película de la tía May, que acabó desechándose, la actriz se habría negado completamente a hacerla.