La rajada de un exconcursante de Gran Hermano: “Era una caja de ratas con cristales”

Carlos Bernal fue uno de los concursantes de la última edición de Gran Hermano antes del parón, y el chef ha hablado sobre lo mala que fue su experiencia

La rajada de un exconcursante de Gran Hermano: “Era una caja de ratas con cristales”
Las críticas al formato - Telecinco

‘Gran Hermano’ fue durante muchos años, casi 20 ediciones ininterrumpidas, uno de los programas más vistos de la televisión española. Lo que empezó siendo un experimento social con fines académicos, pero que se retransmitió en televisión, terminó por convertirse en la ‘gallina de los huevos de oro’ para Telecinco. Hasta 2017 el programa se emitía cada año, y cada vez iba ganando incluso más audiencia, con la creación de diversos formatos derivados del original, como ‘GH Dúo’. Sin embargo después de la edición 2017 se tuvo que detener el programa por cuestiones legales con uno de los concursantes, y hasta este año, la idea original con protagonistas anónimos, no había vuelto. Esa última edición de ‘Gran Hermano’ fue muy importante y especial, porque se trató de hacer algo muy diferente. En un principio se contó con 100 personas dentro de la casa de Guadalix de la Sierra, para después ir poco a poco eligiendo a quienes serían los concursantes definitivos.

“Se echa encima la sociedad”

Uno de esos elegidos fue Carlos Bernal, que actualmente trabaja como chef y que recientemente ha planteado que la experiencia no le resultó nada positiva. Si algo se criticaba, y se critica de este concurso es que muchas de las cosas que ocurren no sean reales, sino que sean pactadas para dar audiencia y demás. Pues bien, Bernal en parte ha planteado que al menos en su edición, eso era en buena manera cierto. En el podcast ‘El Guardián de los Sabores’ el cocinero ha planteado que todo estaba monitorizado, que era “una caja de ratas con cristales”. Ha querido dejar claro que no existe guion, pero que aun así hay muchas cosas de las que se viven en la casa, que si se ven en televisión, podrían suponer una polémica enorme, podría hacer que la “sociedad se eche encima”.

Lo que sí plantea Bernal es que por parte de la organización se hace todo lo posible para generar las famosas broncas que siempre protagonizan los concursantes. “Me han puesto bocinas de cambión para que no me pueda echar la siesta”, declaraba el exconcursante. “Al final te gripa la cabeza, y cuanto más gripada tengas la cabeza, el pollo será más gordo. Con el que peor te llevas, eses es con el que te juntan en todas las pruebas. Duermes al lado de tu peor enemigo”, declaraba el cocinero.