El FC Barcelona sigue muy pendiente de lo que pase con Dani Olmo, quien todavía no ha sido inscrito. A pesar de las más que probables salidas de Gündogan y Vítor Roque, lo cierto es que la entidad de la Ciudad Condal no termina de resolver sus problemas en esta materia, la cual le ha traído numerosos quebraderos de cabeza en los últimos años. Entretanto, se ha de estar atento con el futuro de otros futbolistas, como puede ser el caso de Ansu Fati, alguien que ha estado no pocas veces en la rampa de salida.
Ya informamos hace unos días en ESTADIO Deportivo de que la intención del joven delantero, que militó en la Premier el pasado curso, era la de no dejar el FC Barcelona. Ansu Fati tenía y sigue teniendo claro que puede convencer al que es su entrenador, Hansi Flick, y por eso se exprime en cada entrenamiento, buscando que el germano se persuada definitivamente de la importancia que tiene para su equipo. En estos momentos, salvo que haya un giro de guion radical en el mercado, parece que lo ha conseguido.
El ex del Bayern tiene mucha fe depositada en el joven atacante, que tiene una sola misión desde que regresó al cuadro que suele disputar sus encuentros en el Camp Nou: reivindicarse. Esta palabra es clave para un Ansu Fati que cuenta con el respaldo de un Flick que quiere llevar a sus jugadores a una nueva dimensión en todas las competiciones. No será fácil, pero el alemán quiere demostrar de lo que es capaz en una entidad que no atraviesa su mejor momento.
Ante la perspectiva de que se pudiera quedar, tal y como informa As, desde los primeros días de la pretemporada, el cuerpo técnico se centró en Ansu Fati, preparándole una serie de ejercicios muy concretos. Todo, con el objetivo de que recupere su mejor nivel, aquel que maravilló a todos en sus primeros meses como futbolista profesional. A pesar de que sufrió una fascitis plantar antes de la gira por los Estados Unidos, Flick siempre lo ha tenido claro con su jugador. “Ha hecho unos entrenamientos buenísimos, se estaba poniendo en forma y lo demostró en el campo. Le tenemos que ayudar a volver con más fuerza”, comentó.
Si no se diera la llegada de un extremo izquierdo, algo que podría cambiar los planes, lo normal es que Ansu Fati tenga una segunda oportunidad en el equipo en el que debutó al más alto nivel. Flick está dispuesto a mantener su palabra, por lo que, ahora, la pelota está en el tejado de un jugador que no tiene otro objetivo en mente que no sea el de demostrar de nuevo por qué se ganó un hueco entre los mejores jugadores del primer equipo culé, que necesita recuperar su posición de privilegio en Europa.