Marcus Rashford quiere quedarse en el Barça y el club estudia posibles fórmulas

El FC Barcelona ha comenzado a trabajar en la firma definitiva de Marcus Rashford, futbolista cedido por el Manchester United hasta final de temporada. El delantero inglés se ha convertido en una pieza clave para Hansi Flick y el área deportiva está encantada con su rendimiento, buscando posibles soluciones para pagar su gran salario

La cesión de Rashford ha sido, por ahora, un éxito rotundo para el FC Barcelona. El club catalán aprovechó la voluntad del propio jugador de vestir de blaugrana y su deteriorada relación con el técnico del Manchester United, Rubén Amorim, para cerrar una operación favorable. Sin embargo, el escenario que se abre a partir de este punto será mucho más complejo: retenerlo implica gestión financiera, visión estratégica y la colaboración de todas las partes implicadas.

El director deportivo azulgrana, Deco, ya advirtió que las decisiones estructurales, incluidas las de Rashford y las de jugadores que acaban contrato como Lewandowski o Christensen, se tomarán a final de temporada. El inglés es un caso especial: su salario ronda los 40 millones de euros anuales y el Barça no está dispuesto a asumir esa cifra. Aun así, el rendimiento ofensivo del atacante justificaría cada euro invertido.

Rashford brilla en el Barça y el club ve una oportunidad de mercado

El internacional inglés se ha adaptado rápido al sistema de Hansi Flick. Suma cinco goles y siete asistencias desde el inicio del curso y es, de momento, el atacante con más minutos gracias al respeto de las lesiones. Su capacidad para desbordar, atacar espacios y ser vertical por la banda izquierda ha sido diferencial, especialmente en partidos cerrados.

La gran incógnita es su rol cuando todos los delanteros estén recuperados. No obstante, en el club tienen claro que Flick valora su fútbol por encima de los nombres: Rashford aporta profundidad, ritmo competitivo y lectura táctica en transiciones. Según Sport, Deco ya ha trazado un plan para intentar retener al jugador más allá de esta temporada, convencido de que su impacto puede ser duradero.

Cláusula de 35 millones y el salario como gran escollo

El Manchester United no tiene intención de rebajar los 35 millones de euros acordados como cifra de rescisión en el contrato de cesión. El Barça, sin embargo, considera ese precio asumible y razonable si se tiene en cuenta el rendimiento mostrado por el inglés. Jugadores de perfil similar están valorados en el doble por la Premier League, una liga con inflación constante en sus cifras de mercado.

El verdadero desafío está en su ficha. Para seguir como culé, Rashford deberá rebajar sustancialmente su salario anual y compensarlo con un contrato más largo, probablemente hasta 2030. Su entorno ya ha trasladado predisposición positiva y, según fuentes consultadas por el club, el futbolista prioriza estabilidad, rol deportivo y proyección a futuro.

Un movimiento estratégico que condicionará otros fichajes

En el Barça son conscientes de que activar esta operación implicará sacrificar recursos salariales de cara al próximo verano. Firmar a Rashford significaría invertir una valiosa oportunidad que podría influir en la llegada de un delantero centro de primer nivel.

Aun así, Rashford es percibido como un activo de alto valor: joven para el mercado inglés, atractivo para Arabia Saudí y con margen para seguir creciendo. Además, su nombre reforzaría el proyecto deportivo en una posición donde el club ha exigido mayor regularidad en los últimos años.

Las conversaciones ya se han iniciado y ambas partes avanzan con calma. La operación se cocina a fuego lento, pero el Barça se decanta por el fichaje en propiedad. Si Rashford acepta bajar su salario, el club activará una incorporación estratégica que puede marcar el verano. A día de hoy, quedarse en el Camp Nou es una opción tan real como deseada, y el futbolista parece decidido a continuar vestido de blaugrana. Ahora, la pelota está en su tejado financiero.