Óscar Murillo4 min lecturaLos futbolistas del Real Betis que pasaron por zona mixta para atender a los medios de comunicación lo hicieron, como no podía ser de otra forma, apesadumbrados, conscientes del frenazo en sus aspiraciones que suponía el 3-2 en Pamplona, que obliga a hacer autocrítica. El caso es que Guido Rodríguez y Ayoze Pérez fueron algo más diplomáticos, políticamente correctos, aunque sin esconder el enorme lastre que supuso empezar con un 2-0 a los doce minutos, mientras que Juan Miranda no puso paños calientes y lanzó un mensaje duro, contundente y realista a todos, empezando por él mismo, que debe obrar una reacción inmediata. "En el primer tiempo nos agarraron en un par de ocasiones a la contra, que no fueron tantas situaciones, pero sí claras; sufrimos, porque así nos metieron los tres goles", explicaba el argentino, autor del 3-2, que, pese a todo, reconoció que no les sorprendió: "Sabíamos que ellos hacen ese juego en casa, que son intensos y salen a apretar al rival; fueron errores nuestros y lo tenemos que corregir".
"Nos agarraron mal parados (colocados) y, así, llegaron sus goles, por lo que se hace más difícil. Contento estamos cuando ganamos. Habría preferido que marcara otro y llevarme los tres puntos, que era lo que veníamos a buscar, pero esto sigue. Los últimos partidos son difíciles para todos y tenemos que continuar luchando por el objetivo", zanjaba el pivote a la hora de analizar el cabezazo que dio esperanzas al final al Betis, un análisis similar al del canario. "Lo hemos intentado hasta el final, creamos suficientes oportunidades, pero el inicio de partido es lo que nos condena. Al fin y al cabo ponerte 2-0 abajo es complicado; conseguimos recortar distancias, pero los errores de concentración y organización nos condenan. Lo intentamos hasta el final pero no pudo ser", apuntaba el aún futbolista del Leicester, que el Betis tratará de retener el próximo curso. "Tenemos que seguir peleando por un objetivo muy importante. Los errores nos han condenado en la tarde de hoy, y ése es el resultado. Conseguimos dos goles y no fueron suficientes. Al final, el resultado es negativo", terminó.
Como ya se ha apuntado, Miranda fue más vehemente: "Jugando lo que nos estamos jugando, no deberíamos salir así. Hemos encajado esos dos goles al principio que nos obligan a ser autocríticos, empezando por mí mismo. Dentro de dos días, como quien dice, tenemos otra final y, si queremos estar ahí arriba, el objetivo es no fallar más. Todos los rivales serán complicados, porque todos nos estamos jugando mucho. Pero debemos ser, insisto, autocríticos. ¿El tiro al poste de Montoya al final? Lo hemos intentado, pero no podemos salir así… Trabajaremos estos días para que el martes, con toda nuestra afición al pie del cañón, demostremos dónde estamos y por qué luchamos”. Toda una declaración de intenciones para espolear al vestuario.
ÓSCAR MURILLO / FERNANDO RUIZ