Catalán, su sueño de ser presidente o director deportivo, la diferencia con el Sevilla y la famosa carta a Serra Ferrer

"Tengo gusanillo de de estar como estoy en el Real Betis, influyendo de forma importante en todo este proceso de cambios. Tenemos muy claro que hacemos muy buen equipo, tanto Ángel Haro como yo, pero no me quiero olvidar del resto del consejo. Tenemos ahí una serie de personas que está aquí colaborando en el Betis sin cobrar absolutamente nada, como el presidente, que trabaja para eso. Y, al final, esto funciona bien; es un gran presidente. Los dos llevamos esto de la mano, en los momentos buenos y en los malos, y las cosas van bien y tienen que seguir así", explicaba José Miguel López Catalán a Rafael Almansa durante su larga charla en la última edición de 'Sevillanía', de 'El Chiringuito de Jugones' en La Sexta. Descartaba el empresario hispalense una aspiración a ser el líder, apostando por el trabajo en equipo: "Tras 11 años, esto es fruto de mucho trabajo, de dejar un poco de lado nuestras empresas. Y recalco que no cobramos nada, absolutamente cero. Incluso todo el resto del consejo recibe cero, absolutamente nada. Nosotros lo que queríamos era aportar lo que pudiéramos y ayudar para que para que cambiara el Betis".

Y a la vista está que lo han conseguido: "El equipo tiene que estar todos los años compitiendo por Europa. En esa época, cuando llegamos, eso era una quimera, era hablar por hablar. Pero, bueno, ahora estamos aquí, han pasado 10 años y éste va a ser el quinto seguido en el que, si todo va bien, nos vamos a clasificar". Sin pelos en la lengua, el veterano periodista de TV y radio (actualmente en Cope Sevilla) le cuestionó sobre otra leyenda urbana: él es el director deportivo en la sombra: "Nada, de ninguna manera. Para mí está muy claro que la parte más importante para que funcione bien es el área deportiva de un club. Esto no es un restaurante. De eso tanto Ángel como yo nos dimos cuenta cuando llevábamos aquí poco tiempo. No se trata solamente elegir los mejores jugadores; es un engranaje de muchísimas cosas que tienen que funcionar. Y nosotros pensamos que, como máximos responsables, tenemos que estar coordinando y definiendo todo eso. Ahora, nuestro modelo es muy claro; es lo que llevamos haciendo muchos años. Se basa en tener a los mejores profesionales en cada área y que, al final, para componer una plantilla, para fichar un jugador, tiene que haber un gran trabajo de scouting, de informes".

Catalán incidía en esta idea: "En las decisiones tienen que estar de acuerdo los secretarios técnicos, el director deportivo y el entrenador. Como te puedes imaginar, no somos ni yo ni Ángel los que dicen 'mira, nos gusta Antony o nos gusta mucho Pepito Pérez Eso funciona con una buena dirección deportiva. Y hemos conseguido un gran director deportivo. La verdad que ese puesto es clave. Todos sabemos que el puesto de entrenador es fundamental, especialmente para el rendimiento del equipo, pero el puesto de director deportivo para un proyecto deportivo es importante. Y nosotros, en este caso, tenemos la sensación de que Manu Fajardo lo está haciendo extraordinariamente. Pero es que, además, tiene un equipo de trabajo que está formado de varias personas; están Álvaro (Ladrón de Guevara), los 'scouts', (Juan) Merino, (Juanjo) Cañas... Eestán siete u ocho más. Todos ellos opinan sobre cada jugador y hacen sus informes. Cuando tienes a 10-12 personas que ven el juego y todos ellos se ponen de acuerdo en que el que vale es Pepito Pérez, al final aciertan".

Por último, salieron a colación Serra Ferrer y su abrupta salida al principio de la etapa de Haro y Catalán: "Lo que pasó, por supuesto, nos dolió mucho. A todos. Le dolió a Ángel, me dolió a mí y le dolió a Serra. Pero, como he dicho muchas veces, fue una decisión que tuvimos que tomar. Las decisiones las tomamos Ángel y yo conjuntamente, como hacemos con las decisiones importantes. Simplemente pensamos que había que darle un giro al área deportiva para trabajar de esta forma que que yo estaba comentando. Lo que sí puedo decir es que soy la persona que más hizo por traerlo al Betis de vuelta. Y, además de eso, fui la persona que, durante el tiempo que estuvo aquí, más tiempo pasó con él. Al final, las tensiones del fútbol, que muchas veces son así, las presiones del fútbol, pues nos llevaron a ese momento de ruptura que a mí, la verdad, me da mucha pena. Pero yo le deseo lo mejor. Es un gran entrenador. Sé que es una persona que vive el Betis y que sufre el Betis. Y le deseo lo mejor, por supuesto, a Lorenzo".