El vestuario del Betis 2005 ofrece la receta para ganar al Chelsea y ensalza el papel de la afición: “Escuchábamos hasta los pisotones”

Ninguno de los cuatro míticos futbolistas de aquel Betis campeón de Copa del Rey en la temporada 2004/05, donde además selló su primera clasificación para la UEFA Champions League sigue en activo. Veinte años han pasado ya de aquella época de proezas tan vanagloriadas como la victoria ante el Chelsea en la Jornada 4 de aquella fase de grupos. Bien sea como entrenador de porteros, agente de futbolista o primer entrenador, tanto Koke Contreras como Dani Martín, Xisco Muñoz y Edu Schmidt continúan vinculados al fútbol. Cada uno desde un punto geográfico distinto atiende a ESTADIO Deportivo para repasar la final de Conference League y recordar su experiencia en el Betis-Chelsea de noviembre de 2005 donde los verdiblancos salieron victoriosos.

Un ambiente "mágico"

El ahora entrenador manacorí recuerda la experiencia como uno de los partidos más emocionantes de su historia: "Fueron dos partidos totalmente diferentes. En casa lo que más recuerdo es el ambiente. Lo que hubo ese día fue algo mágico. Recuerdo cuando Dani marca el gol cómo aquello fue algo que no puedo describir con palabras. Fue algo único. Se juntó el campo lleno de béticos y aquello fue un estallido. Fue una auténtica locura y un auténtico privilegio poder vivir ese momento. A partir de ahí, como equipo teníamos delante un equipo jodido. Eran rápidos, tenían jugadores como Drogba, Lampard, Del Horno… Había jugadores espectaculares. Son uno de esos partidos de Champions League, de los que van al máximo ritmo y a la máxima intensidad. Para resumir me quedo con el recibimiento en el campo, la afición, la atmósfera y poder conseguir esa victoria”.

La misma cuerda sigue Contreras en este caso: “Han sido grandes partidos en los que la afición nos ha ayudado muchísimo. Me acuerdo también de esos partidos en la UEFA, en la Liga, también con el Málaga, en los que la afición, descaradamente, te ayudaba muchísimo, te hacía perder el cansancio y correr más sin fatiga. Pero ese partido, recuerdo el estadio con un aura que era imposible que perdiésemos o que empatásemos siquiera. Ese partido lo íbamos a sacar. Luego llegó el gol de Dani, el estadio se rompía, se caía, se escuchaban los pisotones de todo el estadio pisando, haciendo ruido, pegando a las pancartas. Lo comento con muchos excompañeros, con amigos. No me acuerdo de ningún momento como ese. Además de todos los traspieces en cuanto a pérdida de jugadores y demás, el poder meter ese gol, el poder, entre todos, defender el resultado. En ese momento veíamos que teníamos a la gente, éramos como si fuéramos invencibles, inmortales.

Una anecdótico rifirrafe con Didier Drogba

Una de las claves del encuentro fue el hecho de no dejarse intimidar por el nombre y la talla del rival: "El protegernos unos a otros, el no dejarnos intimidar desde la banda por Mourinho, en el campo por todas esas figuras, Lampard, Drogba, en la potería Peter Cech, Terry en el central... Bueno, muchísimos. Todos eran figuras, era el número uno en su puesto. De hecho, recuerdo, en relación a esto, cómo nos protegíamos entre nosotros, cómo nos reforzábamos cuando había alguna afición, algún momento"...

"Tal era el hambre de este futbolista que casi se terminó comiendo a Didier Drogba: "Una jugada que creo que era ya en el segundo tiempo. Íbamos ya por delante, 1-0, y Melli, mi compañero, estaba en defensa. Estaba conmigo y hubo una falta en ataque de Drogba, creo, y como que le empujó a Melli y yo me fui como un loco para él, como para recriminarle. Hay una foto muy chula, muy graciosa, porque yo me vengo arriba y me voy corriendo hacia él. Cuando me doy cuenta, la proporción era esta. Mi cabeza estaba con la barbilla de Drogba. Es muy graciosa porque yo no me achanto, tiro para adelante y el Drogba se me queda así mirando para abajo como diciendo, pero bueno, ¿este qué hace? Y le soplo y lo tiro. Pero un poco era ese el espíritu, que no nos íbamos arrugar por el tipo de jugador que sean, por lo que hayan ganado, por lo buenos que sean", relata Conteras.

Las claves para lograr el título

El aspecto decisivo para Dani Martín, autor del gol del triunfo, es la seguridad defensiva: "El Betis va a tener oportunidades seguro como lo tuvimos nosotros hace 20 años y bueno, hay que aprovecharlas y estar bien en defensa. Yo creo que eso es primordial para que el equipo vaya cogiendo moral y se vea y se crea que se puede conseguir la victoria. Yo creo que lo más importante es eso, que no te metan rápido".

Se basa Xisco en la necesidad de mantener la concentración: “En estos partidos cualquier detalle es importante. Cualquier momento te puede cambiar, cualquier error individual te puede cambiar el ritmo o la situación del partido. Todos los detalles de concentración que puedan controlar pues por ahí estará. Será una final igualada. Dos equipos que les gusta jugar, pero el que tenga que llevar la iniciativa, con un resultado a favor siempre es un viento que te sopla por detrás. Cualquier mínimo detalle puede ser la clave para ganar”.

Para Edu Schmidt, la clave para el triunfo es que el Betis de Pellegrini mantenga su identidad: “La clave es que el Betis sea el equipo de esta temporada. Viene haciendo buen fútbol, ha demostrado un nivel muy bueno. Tiene jugadores importantes a nivel individual como Isco, como Lo Celso, como Antony. Son jugadores que vienen marcando la diferencia y el hecho de tener el balón yo creo que será fundamental para hacer daño al Chelsea. Tenemos que ser el Betis que todos venimos disfrutando esta temporada”.

Finalmente, para Koke Contreras la clave está en la capacidad de mantener la cabeza fría: "Creo que tienen que estar, desde mi punto de vista, muy concentrados en no perder esa entidad, en no dejar de tener esa creatividad atacante, con muchas opciones de tantos jugadores, y luego acompañado con una solidez y una firmeza defensiva, ese equilibrio, ese tan famoso equilibrio, que hace que los equipos puedan ir hacia arriba fácil, sin olvidar y sin darle muchas opciones al equipo para que no te pillen en situaciones en las que no estés guarnecido".