José Antonio Rivero4 min lectura
Celta
Osasuna
El Celta arrancó LaLiga EA Sports con una decepcionante derrota frente al Osasuna (0-2), superior durante todo el partido a un rival al que destrozó con su juego aéreo y dos goles de Rubén García y Moi Gómez que no fueron más por las paradas de Iván Villar y los postes.
En la temporada 2023/24, el club vigués celebra su Centenario, marcando un hito histórico en su existencia. Uno de los momentos más destacados en la conmemoración de estos primeros 100 años de vida fue la creación de un himno exclusivo para el Centenario. La composición 'Oliveira dos Cen Anos' estuvo a cargo de C. Tangana, agregando un toque único a la celebración y conectando aún más al club con su apasionada afición.
En una soleada tarde de domingo, el estadio se llenó con una multitud entusiasta, a pesar de la fecha marcada en el calendario: 13 de agosto. La melodía del Himno de Pucho resonó a través del estadio, acompañando la entrada de los equipos Celta y Osasuna al terreno de juego desde los vestuarios. La escena fue impresionante, con miles de seguidores celestes poniéndose de pie desde sus asientos. Bufandas ondeando en el aire mientras se unían en coro, entonando los primeros versos magistralmente interpretados por la Coral Casablanca. "Creo que estoy enamorado, de tus dos ojos azules...".
El sentimiento en el estadio se intensificó aún más cuando las gradas vibraron al unísono con la frase "Un escudo en mi pecho". Sin embargo, el momento más conmovedor llegó cuando todos los rincones del estadio, impulsados por la pasión de miles de voces, unieron fuerzas para cantar con fervor "en la alegría soy celeste, celtista sin sufrir".
El himno recién estrenado se ha convertido en un símbolo de unidad y pasión para el club y su apasionada afición. A medida que el Centenario continúa desplegándose a lo largo de la temporada, la canción seguirá siendo un recordatorio constante de la historia, la identidad y el amor compartido por todos aquellos que forman parte del mundo celeste.
La elección de Antón (C.Tangana) para crear el himno del Celta de Vigo no tiene ningún propósito oculto. Aunque nació en Madrid y creció en el reconocido barrio de Carabanchel, Antón no intenta ocultar sus raíces. La influencia del celtismo en su vida se debe al legado de su padre, quien nació en tierras viguesas. La pasión por el Real Club Celta de Vigo que su padre le transmitió ha sido una constante a lo largo de su trayectoria.
Este vínculo genuino con el equipo ha sido el factor clave que llevó al club a buscar la colaboración de Antón para crear el himno conmemorativo del centenario. Su historia personifica la pasión compartida por todos los seguidores que, a pesar de no tener la oportunidad de estar físicamente cerca de su equipo, mantienen viva la llama de la devoción.
La conexión de Antón con el club trasciende la geografía y demuestra que la pasión por el Celta de Vigo puede encontrar hogar en los corazones de aquellos que, como él, se sienten arraigados a través de sus raíces familiares. Su contribución a través del himno del centenario es una celebración de la dedicación inquebrantable de los aficionados que mantienen viva la llama del celtismo, independientemente de su lugar de origen.