El misterio de Corea del Norte: del reinado en las categorías inferiores a fantasma en la absoluta
La selección femenina, campeona en los torneos juveniles, lleva más de una década sin aparecer en la élite mundial y la razón es todo un misterio
Corea del Norte es uno de los países más herméticos del mundo y todo lo que le rodea tiene un aura de misterio palpable cuando escuchamos algo sobre ella. Aunque si algo tiene en común con España, es su amor incondicional por el futbol. Existe una liga nacional, la Liga Premier de la República Democrática Popular de Corea, cuyos clubes a menudo pertenecen al ejército o a ministerios estatales. De hecho, la selección norcoreana revalidó el título el pasado sábado en Marruecos como campeona del Mundial Sub-17 ante Países Bajos, sellando el de nuevo la calidad de su juego. Eso no ocurre con la absoluta, que lleva sin aparecer en un Mundial desde 2011.
El dominio de Corea del Norte en el fútbol femenino
Corea del Norte ha ganado tres Mundiales sub-20 y cuatro Mundiales sub-17 en los últimos 20 años, pero sin embargo, lleva sin jugar un Mundial a nivel absoluto en la categoría femenina desde hace catorce años. Un misterio que aún no se ha resuelto.
El país norcoreano no es que no haya conseguido triunfar en la absoluta, sino que tampoco ha estado presente en las grandes citas. Las asiáticas no han aparecido en los tres último Mundiales, lo que significa que llevamos sin verlas desde hace más de una década. La última vez que pisaron el césped de una competición mundial fue en el Mundial de Alemania en 2011, donde se vieron forzadas a despedirse en fase de grupos debido a una sanción por dopaje.
El test de dopaje que cambió el rumbo de la selección
El 7 de julio de ese año se confirmaron los positivos en las pruebas antidopaje de las futbolistas Song Jong-sun y Jong Pok-sim. Aunque ese no fue el único golpe para la selección de Corea del Norte, ya que nueve días más tarde se arrojó que Hong Myong-hui, Ho Un-byol y Ri Un-hyan habían dado el mismo resultado, después de la exigencia de que se les hiciese a todos los miembros del equipo las pruebas.
La explicación fue de lo más variopinta, ya que según contó la Asociación de Fútbol de Corea del Norte, todo fue provocado por un relámpago que afectó a varias futbolistas durante un entrenamiento días después del debut ante Estados Unidos. Para contrarrestar los efectos de la descarga, recurrieron a la medicina tradicional china, en concreto el extracto de una glándula de ciervo almizclero. La FIFA multó a la asociación coreana con 400.000 dólares y excluyó a la selección norcoreana del Mundial de 2015 que se celebró en Canadá.
Desde entonces, ni rastro de las selección de Corea del Norte absoluta femenina, que no ha jugado ni el Mundial ni la Copa Asiática. La última vez que tuvieron presencia en unos Juegos Olímpicos, fue en Londres 2012 donde cayeron en la fase de grupo. Ahora solo falta esperar, ya que esta nueva generación lo puede cambiar todo. Ya está clasificada para la Copa Asiática 2026, por lo que su reaparición puede ser más pronto que tarde.