Sergio Ramos espera dar el 'broche de oro' a su carrera levantando el Mundial de Clubes con Rayados
Sergio Ramos busca cerrar su carrera levantando el Mundial de Clubes con Monterrey como broche de oro
El experimentado defensor Sergio Ramos encara con entusiasmo un nuevo desafío en su carrera: conquistar el título en el Mundial de Clubes de la FIFA con el Monterrey. A sus 39 años, el excapitán del Real Madrid mantiene intacta su mentalidad ganadora y considera que este torneo representa una oportunidad única para cerrar su trayectoria levantando un trofeo internacional más.
Sergio Ramos, un cambio de vida y una nueva motivación
Tras su paso por Madrid, París y Sevilla, Ramos dio un giro a su carrera al firmar con el conjunto regiomontano. "Es un paso grande, un cambio importante en mi vida. Me gustan los desafíos, me gusta conquistar nuevas metas", comentó el zaguero andaluz. El atractivo de la Liga MX, el proyecto deportivo de Rayados y la calidad de vida en la ciudad fueron claves en su decisión.
El defensor también mencionó el papel de compatriotas como Canales, Óliver y Lucas Ocampos, quienes ya estaban familiarizados con el fútbol mexicano y le hablaron positivamente del club y del entorno. “Me atrajo mucho lo que representa Monterrey como institución. Me aporta equilibrio, valor deportivo y calidad de vida”, explicó.
El Mundial de Clubes, clave para Sergio Ramos
La edición 2025 del nuevo formato del Mundial de Clubes será una prueba de fuego para Monterrey, que deberá medirse ante históricos como Inter de Milán y River Plate. Para Ramos, este torneo es más que un objetivo colectivo: es un escaparate para mostrar el nivel competitivo del fútbol mexicano.
“Será una experiencia única. Estos torneos exigen un nivel de concentración muy alto, porque cualquier error te puede dejar fuera. Personalmente, me genera una emoción especial”, añadió el defensor, quien también destacó la importancia de disputar el certamen en Estados Unidos, un mercado donde el fútbol aún está en pleno crecimiento.
Espíritu competitivo hasta el final
Ramos ha dejado claro que su compromiso y entrega están intactos: “Soy una persona que siempre piensa en grande. Sé que estos pueden ser mis últimos años, pero quiero terminarlos ganando. La derrota siempre puede esperar”. Además, destacó el potencial de los Rayados: “Queremos competir de igual a igual contra cualquier rival. Eso no es negociable. La actitud, el esfuerzo y el compromiso son valores que no se negocian”.

La motivación de levantar el nuevo trofeo de la FIFA, presentado recientemente por Gianni Infantino, es otro incentivo que lo llena de ilusión. “Cuando lo vi, sentí que era una razón más para venir aquí. Es un trofeo precioso y un objetivo por el que vale la pena luchar”.
Monterrey, que jugará sus partidos en Los Ángeles, espera contar con el masivo apoyo de la afición mexicana en el país vecino. Para Ramos, ese respaldo puede ser decisivo: “Jugar en EE.UU. con tantos aficionados mexicanos puede darnos una ventaja. Queremos hacer historia y dejar una huella en este torneo”.