El gol de Van Basten en la Euro 88: la volea que cambió la historia

La selección de Países Bajos ha sido uno de los combinados nacionales que desde siempre ha competido todos los títulos internaciones disputados, ya sea Mundial o Eurocopa. A pesar de haber llegado a varias finales de estos torneos donde se recuerda en especial la de 2010 en el Copa Mundial de la FIFA en Sudáfrica donde fue derrotada por España con el gol de Iniesta, existe una fecha mas recordada para la selección naranja, se trata de 1988, en concreto el 25 de junio de ese mismo año, donde la historia cambio para los holandeses.

Hay retroceder muchos años en el tiempo para detenerse en un momento donde todo el mundo se paró para contemplar un obra de arte efímera pero que se guardaría para los anales de la historia. Se trata de la volea de van Basten en el 58 del encuentro considerada la mejor volea de los torneos.

Si vamos a la historia reciente lo más normal es pensar en la volea de Zidane frente al Leverkusen que dio una Champions el Real Madrid pero hay que viajar más arras en el tiempo para observar un hito que sirvió para que los holandeses lograran un titulo internacional de naciones.

En ese momento, van Basten militaba en el histórico Milan, en ese momento uno de los equipos más punteros del mundo. Fue en esa final de la Euro cuando se vistió de héroe para los suyos recogió un globo lanzado por Arnold Muhren desde la banda izquierda y enganchó una volea casi sin ángulo que reventó la portería defendida por Rinat Dasayev. Había nacido el mejor gol de la historia del torneo hasta la fecha, por su belleza y por su importancia.

A partir de ese momento, de manera consciente o inconsciente o de manera visible o invisible el curso de la historia cambió para las Eurocopas ya que los buenos detalles de los mejores jugadores del momento se veían en los mundiales con los cambios de ritmo de Cruyff, los regates de Garrincha o los inventos de Maradona. Con el paso de los años la Eurocopa fue ganando en valor y uno de los detalles fue ese gol que dese entonces no se ha vuelto a emular con tanta trascendencia.

Un gol para el recuerdo y su recuerdo

Años más tarde en una entrevista recordó tal gol como algo extraordinario que no tiene explicación, simplemente, ocurre. Estas fueron sus palabras. "Fue en la segunda mitad, y ya estaba un poco cansado. El balón me llegó de Arnold Muhren, y pensé: 'Bien, puedo controlarlo y tratar de hacer algo entre todos esos defensas, o podría hacerlo de un modo más fácil, arriesgarme y disparar'. Se necesita mucha suerte con un disparo como ese. Todo fue bien. Es una de esas cosas que a veces simplemente ocurren. Intentas hacerlo, pero necesitas mucha suerte, y en ese momento, a mí se me dio esa suerte para hacerlo en el momento adecuado".