Con una distancia de 13 puntos del Liverpool en la Premier League (aunque con un partido menos), y tras haber sido eliminado de la FA Cup y la Carabao Cup, la Champions League se presenta como la última oportunidad para el Arsenal de Mikel Arteta de lograr un título esta temporada. El conjunto londinense, que nunca ha conquistado la máxima competición europea, afronta este martes el primer asalto de los octavos de final ante el PSV Eindhoven, campeón del torneo en la temporada 1987-88.
El proyecto de Arteta ha demostrado solidez en los últimos años, pero el equipo sigue tropezando en los momentos decisivos. Con las competiciones domésticas fuera de su alcance y la Premier prácticamente descartada, la Champions es la única vía que les queda para salvar el curso.
Hasta el momento, su recorrido en la competición ha sido notable. El Arsenal avanzó como tercero en la fase de grupos y logró el pase directo a octavos, donde el sorteo lo emparejó con un rival de sobra conocido: el PSV Eindhoven. El conjunto neerlandés, dirigido por Peter Bosz, es un equipo impredecible que ya dejó fuera a la Juventus en la ronda previa: “No cambiaremos nuestra forma de jugar, aunque nos adaptaremos al rival. Debemos mejorar en defensa”, señaló Bosz en la previa. Sin embargo, su equipo no llega en el mejor momento, ya que solo ha sumado tres puntos de los últimos doce en la Eredivisie, donde el Ajax se aleja en la cima.
El Arsenal nunca ha logrado imponerse al PSV en una eliminatoria de Champions (su único cruce, en 2007, lo ganaron los neerlandeses), y Arteta afronta este duelo con un serio problema en la delantera. Con las bajas de Gabriel Jesús y Kai Havertz, el técnico ha tenido que optar por una solución de emergencia, reconvirtiendo a Mikel Merino como delantero centro.
A pesar de la situación, los 'gunners' parten como favoritos en este primer partido de la eliminatoria. Por su parte, el PSV confía en el empuje de su afición para sacar un resultado positivo en el Philips Stadion antes de la vuelta en el Emirates.
Ambos equipos viven un contexto muy parecido: sus opciones de conquistar un título dependen de la Champions League. Eliminados de las competiciones coperas y con pocas posibilidades en sus respectivas ligas, este torneo se presenta como su única vía de éxito.
El Arsenal, aunque marcha segundo en la Premier, ha perdido fuerza en la pelea por el campeonato. Tras dos tropiezos seguidos en liga (derrota ante el West Ham y empate frente al Nottingham Forest), el Liverpool se ha distanciado en la tabla.
Por su parte, el PSV atraviesa una crisis similar. Las derrotas frente al Go Ahead Eagles en liga y copa han dejado al equipo de Eindhoven muy lejos del liderato, con un Ajax en racha que ha encadenado siete victorias consecutivas. Sin posibilidades en la liga, la Champions es su gran objetivo.
Uno de los fichajes recientes del PSV, el español Lucas Pérez, no podrá estar en el partido debido a que no fue inscrito en la competición. El delantero, que fichó por el Arsenal en 2016, pasó dos temporadas en el club londinense antes de ser traspasado al West Ham en 2018. Durante su etapa en los gunners, anotó ocho goles en 22 partidos, incluyendo un hat-trick ante el Basilea en Champions.
Ahora, su nuevo equipo buscará la clasificación sin él, mientras que el Arsenal intentará demostrar que aún tiene opciones de pelear por algo grande esta temporada.