Real Betis 1-1 Girona CF: Vanat y Antony amargan el regreso de Isco

El Real Betis y el Girona CF firmaron las paces en una tarde especial para la afición verdiblanco. Muchas eran las ilusiones puestas en este encuentro, con la aparición de Isco como principal noticia relevante del encuentro. Aún más si cabe, la emoción aumentó con el anuncio de la renovación de Isco Alarcón hasta el año 2028, lo que hacía presagiar una gran tarde de fútbol para todos los aficionado verdiblancos. Sin embargo, todo se torció con el primer tanto de Vanat, fruto de un mejor juego del cuadro catalán. La entrada de Isco, y esa búsqueda del gol, acabaron dando sus frutos en la segunda parte gracias al tanto de Valentín Gómez a la salida de un córner. A pesar de unos últimos minutos algo más intensos, los verdiblancos vieron como no pudieron pasar del empate en una jornada festiva en La Cartuja.

El Girona aprovechó la no aparición del Real Betis

Tras el terremoto de emociones que provocó el anuncio de la renovación de Isco, esa euforia generada no se vio luego sobre el césped, con un Betis que vio como el Girona le discutía ese dominio del balón. De hecho, durante esos primeros instantes, el esférico tuvo un dueño, y ese era el Girona. A través de llegadas laterales, el equipo dirigido por Míchel era el que más proponía en el encuentro y el que más parecía intentarlo sobre la portería rival. El cuento podría haber acabado pronto, si Antony hubiese metido a la jaula una clarísima en esos primeros instantes, pero su disparo se fue muy por encima de la portería defendida por Gazzaniga. A pesar de este paréntesis, la fragilidad defensiva bética provocó que el conjunto catalán acumulase llegadas y, en una de esss, acabó llegando el tanto.

Tras una llegada lateral, el sevillista Bryan Gil le puso el balón en bandeja al delantero ucraniano para que pudiese abrir el marcador para el equipo de Girona. Con celebración dedicada a Portu incluida, el conjunto catalán estalló de júbilo tras el tanto logrado. No se puede decir que era algo inesperado, ya que el guion del partido invitaba a que sucediese eso. La banda de Bellerín era la principal búsqueda ofensiva catalana, siendo un auténtico quebradero de cabeza para las figuras verdiblanca. Y es que, a pesar de ese jarro de agua fría, no cambió mucho. El centro del campo bético estaba poco imaginativo, con una posesión que en muchas ocasiones no solía llevar a nada. También sucedió algo parecido con varios balones en largo dirigidos a las armas ofensivas verdiblancas pero, tanto Antony como Cucho, vieron como la mayoría de esas llegadas eran interceptadas.

Con un runrún constante en la grada, debido al nivel del equipo, también se le sumó la aparición del otro juego, como es el de las pérdidas de tiempo por parte del equipo de Míchel. En ciertas jugadas a balón parado, y en los saques de Gazzaniga, muchas eran las retenciones que estaban provocando, creando cierto malestar entre los béticos presentes en el estadio. El juego del Betis se estaba viendo neutralizado, con un Girona que estaba aprovechando a las mil maravillas las dudas béticas en defensa. Lo Celso tuvo una cuando la primera parte ya agonizaba, pero su disparo se marchó cerca de la portería defendida por Gazzaniga. Sin ninguna llegada clara, a excepción de la de Antony, el Girona aprovechó la que tuvo para marchase con ventaja al descanso.

Isco y Antony acabaron marcando el devenir

Manuel Pellegrino lo tenía claro, y es que el encuentro necesitaba revulsivos de urgencias. Para ello, buscó de socios a Amrabat, Abde y Ruibal. Con esa idea de buscar la verticalidad que le faltaba al equipo verdiblanco, el plan de partido parecía ser claro. La idea era la idónea, pero la ejecución no fue la mejor. Sobre el césped, el Girona parecía ser el que tenía la voz cantante, no permitiendo que las acometidas béticas buscasen algo de más peligro. Antony parecía ser el que más lo intentaba, con varias llegadas por la banda que hacían presagiar algo, al igual que por la banda de Abde, aunque el éxito era nulo.

Y es que gran parte del no hacer bético era del Girona CF. El equipo catalán estuvo contundente en la parte de atrás, y se mostró muy seguro en las pocas que tuvo el conjunto verdiblanco. Las jugadas a balón parado empezaban a ser de las pocas que podían acarrear algo de más peligro, siendo una de ellas un disparo de Antony que hubiese significado más peligro si hubiese embocado Marc Bartra. Muchas eran las dudas que había en el equipo, que no se mostraba al igual que en otros encuentros.

Entre medios, la aparición de quilates. Isco Alarcón saltó al terreno de juego cuando había transcurrido una hora de juego. Con una gran ovación, propia del momento, los verdiblancos vieron como su estrella volvía a tener minutos con la camiseta de las trece barras. Esto, en cuanto a juego, no es que cambiase mucho el guion, ya que se siguió viendo a ese Betis perdido que parecía estar a merced de lo que hiciese el Girona. Gran culpa de ello también lo tienen los errores individuales, que fueron constantes.

Antes se nombró lo del balón parado y es que, casi como si de un presagio se tratase, así tuvo que llegar el primer gol verdiblanco. Isco puso el balón en el área y allí encontró de aliado a Valentín Gómez, que embaucó al fondo de las mallas para poder empatar la contienda. Se suele decir que un gol lo cambia todo, y eso no iba a ser menos en este partido. La grada y el equipo empezaron a volver a funcionar como una comunión casi perfecta, intentando llevar en volandas al equipo en busca de esos tres puntos. Fruto de esa ambición, acabó llegando la peor de las noticias. Antony, en un intento de chilena, acabó golpeando en un defensa del Girona CF. Lo que parecía quedarse en una amarilla, acabó decretándose como roja, provocando que el brasileño se pierda el derbi sevillano. La más clara la tuvo el equipo catalán al final, que vio como su disparo se encontraba con Álvaro Valles como principal guardián. Con eso acabó un encuentro que acabó de forma bronca y que supuso un pequeño paso atrás.

Ficha técnica

Real Betis: Valles, Bellerín (Ruibal 46'), Bartra, Natan, Valentín Gómez, Marc Roca (Deossa 76'), Fornals (Isco 59'), Antony, Lo Celso (Amrabat 46'), Riquelme (Abde 46') y Cucho Hernández.

Girona CF: Gazzaniga; Hugo Rincón, Arnau Comas, Vitor Reis, Álex Moreno; Iván Martín, Witsel, Ounahi (Abel Ruiz 82'); Tsygankov (Roca 66'), Bryan (Asprilla 66') y Vanat (Stuani 82').

Goles: 0-1 (20') Vanat; 1-1 (75') Valentín Gómez

Árbitros: Iosu Galech (navarro) dirigió el encuentro desde el césped. Juan Luis Pulido (canario) desde la sala VOR. Roja para Antony. Amarillas para Reis, Bartra, Deossa, Cucho, Hugo Rincón, Gazzaniga y Ounahi.

Incidencias: Partido correspondiente a la 13ª jornada de LaLiga EA Sports celebrado en el Estadio de La Cartuja con 64.268 espectadores. En la previa, se guardó un minuto de silencio en memoria de todas las mujeres asesinadas por violencia machista.