Carlo Ancelotti y la dirección técnica del Real Madrid están muy pendientes de la evolución del malagueño Brahim Díaz, cedido al Milan para que pudiera desfogarse, dada la competencia que tiene en el club blanco. A sus 23 años, su carrera deportiva entra ahora en unos meses cruciales, ya que la cesión a los rossoneri acaba el 30 de junio, sin existir opción de compra, por lo que la última decisión sobre el futuro del mediocentro la tiene la entidad presidida por Florentino Pérez.
La clave del asunto, y la que lo vincula con Dani Ceballos, es que en el Madrid están muy satisfechos con el rendimiento mostrado por Brahim en San Siro, como apunta As; y aunque la decisión final sigue estando en el aire, están muy atentos a sus participaciones en la Serie A para hacerle un hueco en la plantilla a su regreso. Díaz se puede beneficiar de las incógnitas contractuales que rodean los futuros del utrerano, también mediocentro; pero también de dos centrocampistas como Tony Kroos y Luka Modric, que tienen contrato hasta el 30 de junio y sus renovaciones todavía están sobre la mesa.
Brahim fue una fuerte apuesta del Real Madrid, donde llegó en 2019, procedente del Manchester City por 17 millones de euros. Un desembolso importante en su día y una apuesta de futuro, que podría encontrar ya su oportunidad en Valdebebas.
En el Milan, el malacitano suma cuatro goles y una asistencia en las 15 primeras jornadas. El trabajo del atacante lo ha situado como uno de los jugadores mejor valorados del Milan, solo por detrás de Rafael Leao y Fikayo Tomori. Unas estadísticas muy seductoras para abrirle las puertas del Madrid la temporada 2023/2024. Esta oportunidad le llegaría después de tres temporada a préstamo en Italia, y después de haber ayudado al renacer del Milan. Brahim tiene contrato con el Madrid hasta 2025.
Al ex del Real Betis también se le puede abrir ahora una oportunidad para reivindicarse con la vuelta de LaLiga. El utrerano, de 26 años, tendrá opciones de arrancar esta segunda vuelta en el once inicial de Ancelotti, tras las posibles bajas de Modric, Aurélien Tchouaméni y Eduardo Camavinga. Las cosas no estaban siendo fáciles para el sevillano, que en el mes de octubre sufrió una lesión en el bíceps femoral, que lo condenó a perderse seis partidos, dejándolo como el cuarto futbolista blanco que menos minutos ha tenido esta temporada, con apenas 200.
Esa situación podría dar un pequeño giro en 2023, cuando la conjunción del bloque aún no estará completa, con mundialistas aún acoplándose al equipo (Modric, Camavinga, Tchouameni, Militao, Rodrygo, Vinicius… ). Ahí es donde nace su oportunidad: ahora o nunca.
De momento, el futuro de ambos en el Real Madrid está sin resolver.