Se confirma lo de Antonio Hidalgo
El técnico catalán está sacando el máximo partido a su equipo y se confirma que el Huesca está para cosas importantes
El equipo oscense continúa haciendo historia en la Segunda División, alcanzando trece partidos consecutivos sin conocer la derrota, una marca inédita en sus catorce temporadas en el fútbol profesional. Bajo la dirección de Antonio Hidalgo, el Huesca se ha consolidado como un conjunto sólido, competitivo y difícil de batir, colocándose en la zona alta de la clasificación con el objetivo de superar los 50 puntos y aspirar a la promoción de ascenso.
Un equipo sin límites y con números de ascenso
Aunque aún queda un tercio del campeonato, el conjunto azulgrana ha dejado claro que su prioridad es el ascenso a Primera División. Su impresionante racha lo ha catapultado a la pelea por los puestos de 'play-off', desafiando cualquier previsión inicial. A pesar de contar con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, el equipo ha sabido explotar al máximo su potencial, convirtiéndose en un rival temido por su solidez defensiva y eficacia en las dos áreas.
Desde el empate ante el Castellón el pasado 24 de noviembre, el Huesca ha sumado 29 de los últimos 39 puntos en juego, lo que le ha permitido instalarse en la parte alta de la tabla. En sus partidos, ha demostrado ser un equipo que, cuando juega bien, no pierde, y cuando el rival es superior, tampoco cae derrotado. Un Huesca resistente, incómodo y efectivo que ha convertido El Alcoraz en un auténtico fortín.
Un récord histórico que ilusiona a la afición
El empate conseguido en Riazor este domingo supuso un hito en la historia del club: superar el récord de doce encuentros invictos que ostentaba el equipo de Juan Antonio Anquela en la temporada 2016/17. Aquel año, el Huesca terminó disputando el play-off de ascenso, y la afición comienza a soñar con repetir aquella gesta.
Si logran una nueva victoria este fin de semana ante el Racing de Ferrol, los aragoneses no solo ampliarán su racha positiva, sino que también alcanzarán los 50 puntos, una barrera de puntos que, históricamente, garantiza la salvación. Además, su próximo rival atraviesa un momento complicado, ubicado en zona de descenso y con urgencias de puntuar.
Con aún trece partidos por disputar, el Huesca sigue sin ponerse límites en la competición. La ilusión y la ambición se han convertido en las principales armas de un equipo que, sin presión, sigue sumando y sorprendiendo a todos. El próximo desafío será seguir ampliando su estado de gracia este sábado en El Alcoraz, donde buscarán su decimocuarto partido sin perder ante un Racing de Ferrol necesitado de puntos.