Isra pulsa el botón de reset: operado con éxito y periodo de baja

La aventura en el Sevilla FC de Isra Domínguez se está viendo seriamente condicionada por las lesiones. En un deportista de elite que se dedica al fútbol es relativamente normal padecer esguinces o roturas musculares, aunque las tres dolencias que ha sufrido el antequerano desde que se incorporara a la disciplina blanquirroja, allá por el mercado invernal de la 22/23, han sido de larga duración y más infrecuentes. De esta forma, sin apenas haberse adaptado, el extremo tuvo que ausentarse durante cuatro meses por culpa de una luxación traumática en el hombro izquierdo, de la que fue intervenido, por lo que sus seis goles y una asistencia en 14 partidos con el equipo de su ciudad natal apenas tuvieron continuidad como franjirrojo, ya que sólo pudo jugar cinco partidos aquí, perdiéndose uno por acumulación de amonestaciones, retirándose dolorido en el derbi chico.

El punta de 22 años estuvo listo para la recta final de la pretemporada 23/24 con el Sevilla Atlético, teniendo algún minuto en las primeras jornadas y cogiendo carrerilla a partir de la octava. Ese curso lo saldó con 30 encuentros (tres tantos y otras tantas asistencias en su haber) y hasta una llamada de Diego Alonso para que formara parte de la expedición copera a Quintanar del Rey, si bien su estreno con los mayores se dilató hasta la 24/25, con minutos en el torneo del K.O. ante Las Rozas y en LaLiga contra la Real Sociedad, si bien volvería a lesionarse del hombro, esta vez el derecho, por un traumatismo en noviembre de 2024 y fue necesaria una artroscopia que le mantuvo en el dique seco casi cuatro meses también, regresando ya en marzo de este año para ayudar en Primera RFEF al filial y hasta ser llamado a filas por Joaquín Caparrós ante el Deportivo Alavés.

Entre tanto, el Sevilla FC no dudó en renovar a Isra Domínguez hasta el 30 de junio de 2027, aunque su cuarta temporada (tercera desde el inicio) en la capital hispalense tampoco ha arrancado bien. Estaba siendo el malagueño el más atinado de la pretemporada, lastimándose en un entrenamiento la semana pasada y debiendo pasar nuevamente por el quirófano, esta vez para reparar su menisco izquierdo. El club informaba este lunes de que el extremo zurdo había sido operado satisfactoriamente, por lo que iniciará ahora un periodo de recuperación de no menos de dos meses. Aunque no han trascendido detalles de la corrección necesaria en la rodilla afectada, pues resulta clave conocer si tenía afectado algún ligamento, los plazos en este tipo de dolencias van desde las 4-6 semanas para una meniscectomía parcial a los 3-6 meses en caso de ser necesaria una sutura, siendo las rehabilitaciones muy particulares según los individuos.