Matías Almeyda flipa con la ciudad deportiva del Sevilla
El técnico sevillista visitó por primera vez las instalaciones de la ciudad deportiva nervionense, con la que alucinó a cada paso que daba y donde además de conocer a Akor Adams y Tangui Nianzou, vivió un bonito reencuentro con Juan Martagón
Como un niño con zapatos nuevos. Así se podría definir el primer día de Matías Almeyda como entrenador del Sevilla en la la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios. El técnico argentino ha conocido este jueves las instalaciones del club en la carretera de Utrera y se podría decir que ha flipado con las mismas. Como si fuera un niño pequeño que entra por primera vez un parque de atracciones, el argentino no dejaba de mirar todo el terreno que ocupa las instalaciones nada más bajarse del coche.
"Simpático, qué buen lugar", "impresionante, qué lindo", fueran sus primeras palabras nada más pisar el suelo de la ciudad deportiva nervionense, muy diferente a la qué el pisaba cuando era futbolista del Sevilla. "Estoy muy feliz, por fin llegué", le decía el 'Pelado' a Antonio Cordón y José María del Nido Carrasco, que hicieron de 'cicerone'.
"Esta es tu casa, te vamos a enseñar un poco por aquí a toda la gente y todo esto", le anunciaba Antonio Cordón. "Muy bien, muy bonito", respondía el argentino, que se paraba a charlar con un par de canteranos amablemente antes de entrar al interior de las instalaciones y saludar, uno a uno, a todos los empleados del club que se encontraban en su jornada laboral.
Alucinado con el gimnasio y reencuentro con Martagón
De allí pasaban a la zona de entrenamiento del primer equipo, donde el argentino y su cuerpo técnico pasarán la mayor parte del tiempo durante la temporada. "¡Bua!", espetaba nada más entrar al amplio gimnasio, mirando todo a su alrededor, antes de ver el campo de entrenamiento y reencontrarse con un viejo compañero en su etapa de jugador, Juan Martagón, ahora delegado del primer equipo.
"¿Este señor te suena de algo?", le preguntaba el director deportivo a lo que Almeyda contestaba entre bromas: "¡No me pegue eh, no me pegue!". Ambos se fundieron en un fuerte abrazo mientras Martagón le daba la bienvenida al club. Pasaron a la zona del comedor, donde el entrenador también saludo al personal de cocina para acabar entrando al vestuario del primer equipo, donde Almeyda pudo conocer a dos de sus futbolistas que ya se ejercitan en la ciudad deportiva como son Akor Adams y Tanguy Nianzou. "¿Entrenaron?", preguntó el argentino, a lo que el delantero nigeriano respondió rápidamente: "Sí, sí".
Por último, Matías Almeyda conocía su despacho, deteniéndose curioso ante la pizarra con los rostros de sus jugadores, corrigiendo la posición del alguno. "Ya empezamos, ya empezamos", insistía el 'Pelado' con una sonrisa en la cara tras una primera visita donde quedó fascinado con las modernas instalaciones del club sevillista.