Quique Sánchez Flores y el balón parado que condena al Sevilla

Quique Sánchez Flores destripó una nueva derrota del Sevilla en Liga. El técnico ahondó en el balón parado que condicionó las opciones en el partido y ya piensa en duelo copero

Quique Sánchez Flores y el balón parado que condena al Sevilla
Quique Sánchez Flores en sala de prensa - Cordon Press
Manuel PedreroManuel Pedrero 4 min lectura
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Alavés

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Mala imagen del Sevilla FC ante el Alavés en cuanto al balón parado se refiere. La derrota volvió a evidenciar las carencias defensivas de un equipo que no da buenas sensaciones. Le puso fe y ganas para voltear un 0-2 en contra, pero un nuevo córner en contra truncó las esperanzas de la remontada. Rubén Duarte dejaba helado Nervión con un testarazo en el 90. Quique Sánchez Flores analizó el duelo en sala de prensa y subrayó los problemas que están limitando el rendimiento de la plantilla.

Fue sincero reconociendo la sangría al encajar demasiados tantos: "Cuando recibes tres goles no mereces ganar. Todo lo que estábamos haciendo bien lo cruzó un balón parado que ha sido el martirio de todo el partido. Es una pena que se nos crucen estas acciones cuando estábamos haciendo un buen partido. Los mejores 25 minutos desde que estoy aquí, pero nos ha durado poco en cada tiempo, no es suficiente".

Quique reconoce errores

Y fue más allá: "Los fallos son temas futbolísticos. El balón parado se tiene mucho tiempo para pensar y mucha preparación. Ha sido un martirio. Luego hay que actuar, no te pueden ganar las primeras acciones, hay que estar atentos, lo trabajamos mucho y con mucha gente pendiente para que pasen estas cosas. Asumo mi culpa como entrenador, pero es una lástima todo esto", dijo.

Un Sánchez Flores que llegó a hacer tres cambios de una tacada dando entrada a Rafa Mir, Mariano y Sow al comienzo de la segunda parte: "No hay que dudar, si no estás a gusto con lo que estás viendo hay que cambiar, aunque sea de tres en tres. Completamos la reacción del equipo para cambiar el partido. Tenemos mucho que aprender, analizar, vernos bien y sacar lecturas".

Pensando ya en el duelo del martes en Copa, comentó: "Todos los partidos son importantes, más allá de la competición. Nos tenemos que organizar como equipo para que los 95 minutos del partido lo podamos completar con perfecto orden", dijo.

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Malestar en la afición: "Queremos darle a la afición esos veinticinco primeros minutos maravillosos y los reactivos de la segunda mitad. Sabemos que tenemos una afición maravillosa, que nos sigue y tenemos que tener continuidad. La afición hace bien en penalizarnos porque si no no habría reacción".

Mercado: "Conozco muy poco al equipo. Estamos en manos de la dirección del club que lo conoce de los últimos años con un título por medio. Entiendo que el conocimiento de la presidencia es mayor que el mío que llevo cuatro semanas aquí".

Enseñanza: "Tengo la obligación de quedarme con las cosas buenas que el equipo da. Tenemos buenos jugadores, veo la fe que muestran y podemos salir adelante, pero tenía claro que cuando llegué la situación era muy complicada porque han pasado dos compañeros antes y magia no hay. De cada partido sacamos enseñanzas buenas y otras muy malas".

Críticas: "Cuando recibes tres goles no mereces ganar y hacerlo en casa es más grave. Todo lo que estábamos haciendo bien se lo carga el balón parado. Han sido los mejores primeros 25 minutos desde que estoy aquí. Queremos el equipo que domine al rival, que lo meta en su portería, que lo meta en su área, que haga ocasiones de gol, que recupere rápido la pelota. Es lo que queremos pero nos dura 25 minutos del primer tiempo y otros 20 del segundo; no es suficiente".