Álvaro Palomo4 min lecturaEn los albores de la segunda década de este siglo, había un nombre en la cantera del Sevilla Fútbol Club que sonaba con muchísima fuerza, un valor al alza que sorprendía a los técnicos de la Carretera de Utrera por sus cualidades y su proyección. Por entonces, se erigía en una de las grandes joyas de los escalafones inferiores nervionenses y Curro Sánchez estaba llamado, según los especialistas en cantera, a triunfar en el Ramón Sánchez-Pizjuán.De hecho, firmó muy buenos registros en el Sevilla Atlético, en el que disputó un total de 144 partidos con un saldo de 22 goles y 13 asistencias, pero, sin embargo, nunca dispuso de oportunidades reales en el primer equipo, más allá de cuatro partidos en Liga en un tramo de la temporada 15/16, con una suplencia y tres titularidades en las que sirvió una asistencia. Esa misma campaña participó en los dos partidos de Copa contra el UD Logroñés, pero fue un espejismo y en el verano de 2019 se marchó libre para poner rumbo al Numancia.
#[relacionada;multiple;[proveedor:0;id:438593,438545,438567]]A partir de ahí, pasó por la Ponferradina y el Almería, hasta que hace dos veranos recaló en el Burgos tas haber jugado dos partidos con los indálicos en Primera en el curso 22/23 y está claro que el de La Palma del Condado ha encontrado su sitio en El Plantío. En su primera temporada, disputó 34 partidos y terminó con nueve goles y dos asistencias, cifras que va camino de pulverizar en su segundo año, pues el onubense marcó en la última jornada del año su noveno tanto de la campaña en el empate a tres contra el Espanyol y está metido de lleno en la lucha por el Pichichi de la Categoría de Plata.No en vano, Curro solo lleva un tanto menos que Javi Puado (Espanyol) y Peque Fernández (Racing), ambos con diez, y suma los mismos que Martin Baithwaite (Espanyol) y Forés (Villarreal B). Además, en dicho encuentro también ejerció de asistente para sellar su tercer pase de gol del curso, una más que en la 22/23.
Un comienzo meteóricoCurro Sánchez firmó un inicio de temporada espectacular, hasta el punto de marcar ocho dianas en las primeras diez jornadas, lo que le situó por momentos como el máximo goleador de Segunda. A partir de ahí, comenzó una fase de sequía que concluyó ante los pericos con un tanto que lo pone en disposición de acabar la temporada como pichichi.Cabe recordar que Curro es un atacante muy polivalente que puede desempeñarse en todos los frentes de la vanguardia. En el Burgos, a sus 27 años, ejerce sobre todo de mediapunta y de extremo derecho y no cabe duda que esta gran temporada le abrirá de nuevo las puertas de Primera.