El Villarreal no se encuentra pasando por un buen momento, que digamos. El conjunto dirigido por Marcelino, tras empatar en casa ante la Real Sociedad, se ha quedado fuera de combate con la contundente goleada que le ha asestado el Celta, que da un paso hacia delante más que relevante para poder alcanzar las competiciones europeas la próxima temporada. El choque ante los de Giráldez, quien sigue creciendo en el torneo doméstico, ha evidenciado que los castellonenses no se pueden quedar atrás, algo que les está costando. Por si esto fuera poco, hay que hablar de lo que ha sucedido con Ilias Akhomach, quien se situó, en los últimos días, en el punto de mira.
El futbolista, lesionado de larga duración, tuvo un protagonismo inesperado en el choque ante los de Imanol Alguacil, quienes se llevaron un valioso punto en medio de una enorme polémica generada por los árbitros, ya que anularon varios goles a favor del Villarreal. Por ello, la rabia de Ilias fue notable, llegando a golpear el monitor del VAR, algo que, evidentemente, no se puede hacer. Debido a esto, el cuadro de Marcelino estaba pendiente de lo que pudiera pasar con él, ya que se avecinaba un duro castigo.
Lesionado desde octubre por una rotura completa del ligamento cruzado anterior y un esguince en el ligamento lateral interno de su rodilla derecha, Ilias, de por sí, ya era consciente de que tenía imposible volver a jugar esta temporada con la camiseta de un Villarreal que necesita dar un golpe de autoridad para no perder más fuelle. Ahora, con lo que se ha conocido sobre su castigo tras lo ocurrido ante los donostiarras, la entidad de La Cerámica ya sabe que, de forma definitiva, se tiene que olvidar de él.
Tal y como apunta El Desmarque, después de todo lo ocurrido el pasado fin de semana, ya se conoce la sanción a Ilias. Le han caído tres partidos, uno por “conducta contraria al buen orden deportivo” y los otros dos, “por protestas al árbitro”. Después de que rompiera el monitor del VAR tras tirarlo al suelo, si había alguna duda de que la temporada se había acabado para él, esto lo confirma de forma definitiva. De este modo, el futbolista tendrá que centrarse en exprimirse de cara al próximo curso, uno que será más vital que nunca para los de Marcelino, que buscan seguir creciendo sobre el terreno de juego.
Tras lo sufrido ante el Celta, el Villarreal ha sufrido un duro varapalo en la lucha por la cuarta posición, su gran objetivo en estos momentos. Aunque, de forma virtual, tiene casi asegurada su presencia en Europa, el plan de Marcelino y los suyos es poder volver a la Champions de la mejor forma posible, algo que se le complica con el paso de las semanas.
No en vano, hay que tener en cuenta que se encuentran a ocho puntos del Athletic, quien ostenta, actualmente, este puesto de privilegio en el torneo doméstico. De este modo, el Villarreal no tiene margen de error. Tendrá que ganar todos los partidos que le quedan y esperar a que los de Valverde tropiecen. Sino, es poco menos que una quimera que puedan darle el ‘sorpasso’ a los rojiblancos, que quieren ganar la Europa League este curso.